
El azúcar, aunque tentador, puede transformar tu bienestar en un verdadero campo de batalla. Cuando consumes azúcar, se descompone rápidamente en glucosa y fructosa. La glucosa eleva drásticamente tu nivel de azúcar en sangre, forzando a tu páncreas a liberar insulina a toda prisa para evitar una catástrofe interna. Y la fructosa se dirige directamente al hígado, donde puede convertirse en grasa. Y no cualquier grasa, sino aquella que se acumula y se convierte en una bomba de tiempo para tu hígado y corazón.

PUEDES VER: Este PODEROSO ácido graso natural combate la inflamación, la menopausia y protege tu cerebro

PUEDES VER: ¿Cabello opaco y débil? Estos alimentos ricos en biotina lo transformarán de forma natural
El azúcar actúa rápidamente sobre tu metabolismo, por ello es importante reducir su consumo.
Es importante que reduzcas o evites tanto el azúcar blanca como la rubia. Opta por alternativas más naturales y de menor impacto glucémico, como la estevia o la panela.
Médico cirujano y Magíster en Medicina Natural por la Sociedad Española de Medicina Holística. Miembro de la Sociedad Peruana de Hipertensión. Fundador del Instituto Bien de Salud