
Hay un tubérculo que ha sido parte de la alimentación de algunas de las poblaciones más longevas del mundo. Su color vibrante es solo el reflejo de los poderosos compuestos que contiene y que pueden mejorar tu salud de muchas formas. Hablamos del camote morado.
Los camotes se originaron en América Central y del Sur. Su domesticación y cultivo se extendieron por muchas regiones. La variante morada de camote ha sido cultivada durante siglos en diferentes partes del mundo. Ha florecido incluso en Japón, principalmente en Okinawa, una ciudad conocida por la excepcional longevidad de sus habitantes. Los Okinawenses atribuyen su longevidad a muchas cosas y entre ellas se encuentra el camote morado.

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El camote morado contiene grandes cantidades significativas de vitaminas

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El camote puede disfrutarse con o sin cáscara y prepararse de diversas formas: al horno, asado, cocido o a la parrilla. Es una excelente opción para el desayuno o las meriendas, sustituyendo el pan, así como en almuerzos y cenas, acompañado de vegetales frescos y proteínas como pollo, pavo, huevo o pescado.
No existe una cantidad exacta recomendada, pero se sugiere consumir entre 1 a 2 tazas en cubos por comida.
Para personas con diabetes, se recomienda ingerir porciones más pequeñas, entre ½ taza y 1 taza, priorizando su consumo en versión cocida, ya que así su índice glucémico es menor en comparación con el camote asado o a la parrilla.
Médico cirujano y Magíster en Medicina Natural por la Sociedad Española de Medicina Holística. Miembro de la Sociedad Peruana de Hipertensión. Fundador del Instituto Bien de Salud