Si queremos que nuestros niños coman de todo, debemos acostumbrarlos desde bebés a los diferentes tipos de alimentos que son buenos para su salud.
Si tienes un bebé, cada semana se puede introducir un alimento nuevo, aunque el ritmo vendrá impuesto por las reacciones del niño.
Al principio deben triturarse los alimentos y se pueden mezclar con la leche materna. Después del primer año es momento de introducir gradualmente los productos animales.
PUEDES VER: ¿Por qué debes lavar bien las fresas?
Asimismo, los hidratos de carbono deben ser la principal fuente de energía, pero hay que distinguir entre productos refinados (azúcar, harinas, pastas y panes blancos), cuyo abuso favorece la obesidad, la diabetes y las alteraciones del estado de ánimo, y los alimentos integrales ricos en hidratos de carbono de absorción lenta, que proporcionan energía gradualmente sin alentar los niveles de glucosa.
PUEDES VER: ¿Qué pasa si hay un déficit de omega 3?
Se hallan en el arroz los cereales –sobre todo los integrales–, las legumbres, la papa y la mayoría de frutas. Por otro lado, es un error hacer comer a los niños aparte, o antes o después que el resto de la familia.
Periodista, bachiller en Ciencias de la Comunicación de la Universidad San Martín de Porres. Desarrollo temas de Educación financiera como: emprendimiento, economía del hogar y ahorro; asimismo, temas de salud, nutrición y psicología.