El neurocientífico Michel Desmurget expone en su libro “La fábrica de cretinos digitales” la forma en que los dispositivos digitales están causando severos daños al desarrollo neuronal de niños y niñas y jóvenes de esta generación, a quienes llama “nativos digitales”.
“Los investigadores han observado en muchas partes del mundo que el coeficiente intelectual aumentaba de generación en generación. A esto se le llamó el ‘efecto Flynn’”, indicó Michel Desmurget, director de investigación en el Instituto Nacional de la Salud de Francia al medio BBC.
Sin embargo, indicó que esta tendencia comenzó a invertirse en varios países, pese a que “los países donde los factores socioeconómicos se han mantenido bastante estables durante décadas, el ‘efecto Flynn’ ha comenzado a reducirse”.
Desmurget explica que esta tendencia se ha documentado en países como Noruega, Dinamarca, Finlandia, Países Bajos y Francia. “En esos países los ‘nativos digitales’ son los primeros niños que tienen un coeficiente intelectual más bajo que sus padres”, explicó.
El neurocientífico reveló que, los niños de esta generación no son muy buenos con las computadoras, lo que sería un contraste a las ideas populares.
“Un informe de la Unión Europea explica que su baja competencia digital dificulta la adopción de tecnologías educativas en las escuelas. Otros estudios indican que tampoco son muy eficientes para procesar y comprender la gran cantidad de información disponible en internet”, indica Desmurget.
El neurocientífico explica que esta nueva generación es buena para “usar aplicaciones digitales básicas, comprar productos en línea, descargar música y películas, etc.” y que esto se debe a la disminución de desarrollo cognitivo que provoca el “aumento del uso de la televisión o los videojuegos”.
Michel Desmurget explica que Taiwán considera que el uso excesivo de pantallas es una forma de abuso infantil, por lo que aprobó una ley que establece multas para los padres que exponen a niños menores de 2 años a cualquier aplicación digital y que no limitan el tiempo de pantalla de la juventud hasta los 18 años.
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En China, las autoridades ordenan que la juventud no puede usar videojuegos entre las 22 horas y las 8 horas, ni exceder los 90 minutos diarias durante la semana.
De esta manera, el neurocientífico rechaza aquellos estudios que afirman que los videojuegos ayudan a obtener mejores resultados académicos y lo califica como “pura tontería”.
“Esa idea es una verdadera obra maestra de la propaganda. Se basa principalmente en unos pocos estudios aislados con datos podridos, que se publican en revistas secundarias y a que menudo se contradicen”, aseveró.
Michel Desmurget tiene una vasta obra de divulgación científica y ha pasado por reconocidos centros de investigación como el Massachusetts Institute of Technology o la Universidad de California, en Estados Unidos.