
Pese a que muchos pensaban que Florida estaba libre de las imposiciones de Donald Trump por deportar a miles de inmigrantes. Recientemente, el gobernador Ron DeSantis, busca volver a implementar una nueva y polémica ley en el territorio que afectará sobre todo a los extranjeros y que ya lo están padeciendo.
Hace unos días, la Corte Suprema se había negado a debatir la normativa en el Estado del Sol que fue bloqueada por otros tribunales, el cual permitiría a los funcionarios estatales procesar a los extranjeros que no están autorizados de ingresar al territorio.
De acuerdo a lo revelado por la organización sin fines de lucro 'The Marshall Project', al menos 27 personas ya han sido arrestadas bajo esta disposición en el estado, a pesar de la orden del tribunal. De estas, 25 habrían sido realizados por la Patrulla de Carreteras de Florida (FHP, por su sigla en inglés).
Los diversos especialistas indican que esta ley creó "un sistema estatal de control migratorio paralelo" a la administración de Trump, pese a que los jueces especificaron en que las normas de inmigración solo son una "competencia exclusiva del gobierno federal".
A pesar de que la reglamentación no está aprobada, DeSantis también busca incorporar dos delitos para los migrante, según dio a conocer el medio The New York Times.
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