El diario La República entrevistó a un grupo de vecinos de la avenida Próceres de la Independencia, que lleva cerrada tres años tras el aniego que azotó el distrito de San Juan de Lurigancho. Ellos indicaron que se ven perjudicados de manera económica, debido a que sus negocios tienen pocas ganancias.
La señora Delia Pérez (57), tiene un negocio de extintores y afirma que estas obras la han perjudicado a tal extremo que sus hijas tuvieron que dejar de estudiar. "Nos están matando, no venden, de que vamos a vivir. Parece que esto se va a derrumbar por los camiones", agregó.
Ricardo es dueño de un taller de mecánica y desde el aniego sus ganancias han bajado a un 50%. "Diario producía 200 soles y desde hace 3 años solo gano 100 soles", precisa.
Por su parte, Walter Muñoz comenta que los delincuentes aprovechan estas obras para realizar sus fechorías. Además, manifiesta que mantiene su tienda cerrada por la contaminación. "Hay delincuentes, vienen de noche los fumones. Que lo realicen ya. Tenemos que mantener la puerta cerrada por el polvo. Diario ganaba 150 soles ahora ni una gaseosa de 3 litros vendo".
Eva es ama de casa y agregó que por el peso de la maquinaria la estructura de su casa se vio afectada. Ella, evita salir de su casa por temor a que su hijo se lastime. "Afectó a mi domicilio con la vibración de la maquinaria que han traído y lo han dejado así, no lo han visto. Tenemos que soportar", puntualizó.
Óscar Gamarra, quien vive desde hace 30 años en la zona, afirma que han pasado por una etapa muy difícil y piden que la obra se entregue a la brevedad. "Ya están culminando, estamos pasando todavía una pesadilla. Espero que ya sea pronto que terminen. Todos los inquilinos se fueron".
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