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Los beneficios ocultos de los alimentos germinados para la salud y la digestión

Los alimentos germinados son ricos en vitaminas, minerales y enzimas. Conoce sus propiedades y cómo incluirlos en tu alimentación diaria.

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Descubre los beneficios de los alimentos germinados.

Los alimentos germinados son aquellos que han pasado por el proceso de germinación, donde las semillas, granos, legumbres o nueces comienzan a brotar y desarrollar nuevos brotes. Este proceso transforma sus propiedades nutricionales y los convierte en altamente beneficioso para la salud.

Beneficios principales de los alimentos germinados

  • Mayor contenido nutricional: Durante el proceso de germinación, se produce una serie de cambios bioquímicos que aumentan la disponibilidad de nutrientes en los alimentos. Los alimentos germinados suelen ser más ricos en vitaminas, minerales, antioxidantes y enzimas digestivas en comparación con las semillas o granos sin germinar.
  • Mejor digestibilidad: La germinación rompe las capas protectoras de las semillas, lo que facilita la digestión y absorción de nutrientes. Además, la presencia de enzimas digestivas activas en los alimentos germinados puede ayudar a mejorarla y a reducir la carga en el sistema digestivo.
  • Aumento de los fitonutrientes: Durante la germinación, se produce una activación de fitonutrientes y antioxidantes en los alimentos, lo que puede tener efectos positivos en la salud, incluyendo propiedades antiinflamatorias y detoxificantes.
  • Variedad de opciones: Existen varias opciones de alimentos que se pueden germinar, como semillas de alfalfa, brotes de trigo, lentejas, garbanzos, brócoli, entre otros. Esto proporciona una amplia gama de sabores y texturas para incorporar en ensaladas, sándwiches, batidos, platos salteados y más.

Aprende a preparar germinados en casa y aprovecha sus beneficios.

Cómo hacer alimentos germinados en casa

1. Adquiere semillas específicas para germinar en tiendas de alimentos saludables o en línea.

2. Remoja las semillas en agua. Se recomienda entre 6 y 12 horas de remojo.

3. Después del remojo, enjuaga las semillas con agua limpia para eliminar cualquier residuo.

4. Coloca las semillas en un frasco de vidrio o en una bandeja para germinar. Que estén bien distribuidas.

5. Durante el proceso de germinación mantén las semillas hidratadas rociándoles un poquito de agua. Brotarán entre 2 a 7 días.

SOBRE EL AUTOR:

Médico cirujano y Magíster en Medicina Natural por la Sociedad Española de Medicina Holística. Miembro de la Sociedad Peruana de Hipertensión. Fundador del Instituto Bien de Salud

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