Un inmigrante hondureño falleció a causa del monóxido de carbono en Texas, en Estados Unidos, al usar un generador dentro de su casa, para tratar de mantener calientes a su esposa embarazada y a su pequeño hijo.
El trágico suceso ocurrió pasado 15 de febrero en la ciudad de Fort Worth. Kevin Ayala de 23 años, y su familia estaban dentro de la casa, desesperados por mantenerse calientes, tras haber quedado sin energía eléctrica.
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“La casa estaba muy fría”, dijo su amigo Edan Pérez. Entonces Ayala tuvo una idea, una manera para que él y su familia sobrevivieran a las bajas temperaturas, que viene azotando a Texas desde la semana pasada.
“Para mantener la casa caliente, puso ese generador dentro de la cocina”, dijo Pérez. Pero la casa se llenó rápidamente de monóxido de carbono, la familia no podía oler nada, ni siquiera se dieron cuenta que había un problema.
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Aproximadamente una hora después de conectar el generador, su esposa Katherin Padilla contó a la cadena CNN que comenzaron a sentirse cansados y se fueron a dormir.
Un amigo pasó por allí y los encontró desmayados. La esposa y el hijo de Ayala fueron trasladados de urgencia al hospital y se recuperaron. Pero Ayala, quien trabajaba en la construcción en el estado estadounidense en busca del sueño americano, no lo logró.
“Era una persona muy amigable”, dijo su esposa. “Una buena persona y muy trabajador”, agregó. Su familia espera que su muerte sirva de lección para todos sobre los peligros del monóxido de carbono. Incluso si estás desesperado por mantenerte caliente, dijeron, no te arriesgues.
“Eso es un error, realmente un error”, indicó Pérez. Ayala deja a su hijo de 4 años y a su esposa, que está embarazada de su segundo hijo.
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