Rosita Noemi Navarro Bravo salió el pasado 16 de noviembre de su casa, ubicada en la urbanización José Leonardo Órtiz en el distrito de Chiclayo (Lambayeque), con dirección al Hospital Regional, donde trabaja como técnica en laboratorio, pero nunca llegó a su destino.
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Ella se despidió de su familia, les dijo que iba ir a trabajar, pero en medio del camino desapareció. Sus familias intentaron llamarla, pero no contestó el teléfono, ninguno de sus amigos y compañeros de trabajo la vieron y nadie ha podido comunicarse con ella.
A una semana de su desaparición, sus familiares y amigos de la joven estudiante de 35 años realizaron un plantón en la explanada del establecimiento de salud el pasado 22 de noviembre exigiendo que la empresa de telefonía ayuda con la geocalización.
Además, su hermana María Navarro Bravo exigió a la empresa de comunicaciones Claro que entregue el registro de llamadas para conocer con quienes se comunicó Rosita Noemi antes de ser vista por última vez.
“Estamos desesperados buscándola, cualquier información es muy valiosa para nosotros. (…) La Policía está realizando cuatro patrullajes diarios porque no nos movemos de la División de Investigación Criminal (Divincri) y nosotros continuamos pegando afiches dentro y fuera de Chiclayo”, subrayó.
El día que Rosita Noemi desapareció estaba vestida con un buzo negro y una chaqueta blanca. Ella es de tez trigueña, ojos claros y cabello corto. Si conoces de su paradero puedes comunicarte al 945220247 y 902392813 o llamar a la línea 114.
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