La triste historia del edificio abandonado en la Av. Tacna con Emancipación que lleva más de 30 años en juicio

En la avenida Tacna con Emancipación, ubicado en el Cercado de Lima, existe un edificio que lleva más de 30 años en condición de abandono. Lo que inicialmente fue construido con 18 pisos para departamentos, oficinas y estacionamientos, terminó siendo parte del paisaje urbano, ya que hasta la fecha nadie se ha preocupado por remodelarlo. Es por ello, que en esta nota te damos a conocer cuál es su historia.

El inmueble fue un proyecto de la inmobiliaria Oropesa, quien en los años 80, pidió un prestamos al Banco Central Hipotecario para continuar con los trabajos. Sin embargo, en 1982, un representante de este último lugar, llamado Fernando Poncer Salomón, impuso un juicio por el tema de garantía hipotecaria y quiebra.

El hombre exigía este edificio como pago por daños y perjuicios, ya que él avalaba que los deudores se le había entregado la totalidad del préstamo, pero no era cierto. Años después, se dio a conocer que la identidad era totalmente falsa, ni existía en la Reniec, pero ya el lugar estaba abandonado.

Cuando Alan García fue presidente, en medio del 1986, emitió un Decreto Supremo para otorgarle la propiedad al Ministerio del Interior, aunque los dueños no se cansaron de luchar y apelaron. En 1996, el Tribunal Constitucional les dio la razón y decidió que deberían investigar a los funcionarios involucrados.

Los años pasaron, pero la inmobiliaria no pudo terminar la construcción por este litigio y el caso quedó estancado en el Poder Judicial. Este gran edificio con grandes expectativas terminó siendo recinto de delincuentes y drogadictos, aunque en la gestión del alcalde Alberto Andrade, se pudo tapiar e impedir que personas ajenas ingresen.

El caso también llegó hasta la comisión de Justicia del Congreso, por medio de un oficio, donde los dueños aseguran que se produjo un atropello a sus derechos por años y exigieron 200 millones dólares como indemnización, pero aún no ha logrado resolverse, pese a que sigue abierto.

Edificio en problemas

Jesús Linares Cornejo, apoderado de la inmobiliaria Oropesa,  comentó que: “En 1982, recurrimos por un préstamo al Banco Central Hipotecario, que nos otorgó sólo una pequeña parte, pero al poco tiempo nos inició un juicio de garantía hipotecaria y de quiebra, como si nos hubiera dado el total del crédito”.

Los dueños vieron con impotencia como, en 1990, se aprobaba una resolución de contrato, en un proceso de 20 fojas donde se utilizaron tres expedientes presuntamente falsos. La sentencia era de película: no solo les habían quitado el edificio, los Linares Cornejo ahora también eran despojados de su inmobiliaria y eran multados por ocho millones de dólares.

Lejos de amilanarse, los afectados siguieron las acciones judiciales para recuperar el edificio y la inmobiliaria y, en 1992, el Poder Judicial decidió devolver el inmueble al estado, porque era evidente que no podían utilizarlo sin que se perpetren una serie de delitos.

¿Por qué una propiedad está en litigio?

Cuando se refiere a "Litigio" es en el caso la propiedad en un juicio y en algún momento hemos escuchado este término o un aviso por la calle. El litigio es aquella que ha entrado en asuntos legales, lo cual mediante un juzgado se está resolviendo sobre la propiedad de dicho inmueble.

Generalmente, esos casos ocurren cuando los padres en vida no repartieron los espacios de esa casa o no hay un documento claro que así lo avale y de allí comienzan los problemas, sobre todo si alguna de las partes involucradas hay la ambición de querer tomar la posesión de la casa.

¿Qué exige el dueño de dicho edificio?

Con el retorno de la democracia, la administración de justicia sigue igual de lenta en este proceso, por los sucesivos cambios de jueces y la oposición de los Registros Públicos, porque para ellos, el edificio es ahora del estado y de la inmobiliaria Oropesa, a pesar de que en mayo del 2004, se declaró fundada a favor los dueños iniciales.

Sin embargo, hace unos años, por nuevas maniobras judiciales, 24 años después de sancionado el proceso, un juez trata de reiniciar el proceso y nuevamente se reaviva el problema, lo cual motivó al apoderado de la inmobiliaria a presentar recursos de habeas corpus contra todo el Congreso, el Poder Judicial y los organismos del Estado.

Al mismo tiempo, Linares Cornejo ha demandado al Estado Peruano, por daños y perjuicios, y exige una reparación de 200 millones de dólares. Por si fuera poco, prepara llevar el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Comisión de Derechos Humanos de la ONU.

¿Qué significado tiene una propiedad en litigio?

Una propiedad está en litigio cuando ha entrado en asuntos legales que se vienen resolviendo a través de un juzgado. Esto sucede cuando no se deja (o no existe) un documento claro y conciso de quienes son los herederos de dicho inmueble.

A menudo, los reclamos por litigio involucran transacciones de bienes raíces, tales como propiedades comerciales y residenciales, pero también involucran reclamos de propiedad intelectual.

Cuanto costaría un departamento en este lugar

Si bien es cierto, el edificio está abandonado desde hace 30 años, el valor comercial de cada departamento que este disponga sería más caro que hace 30 años pues el valor de las viviendas tiende a aumentar con cada año que pasa y con la llegada de tantos peruanos a la capital, la oferta inmobiliaria es escasa en comparación a la demanda.

El metro cuadrado en el Cercado de Lima ronda alrededor de los 4921 soles el metro cuadrado, esto quiere decir que una casa promedio de 90 metros cuadrados estaría costando 442 mil 890 soles, sin duda un precio regularmente accesible para los peruanos.

¿Cuáles son las tres leyendas del Perú que debería conocer?

• Las Brujas de Cachiche, en Ica:

- La leyenda cuenta que en el pueblo de Cachiche, vivieron varias brujas. Esta mujeres tenían demasiada experiencia creando hechizos de amor y al mismo tiempo realizaban trabajos para sanar a los enfermos con brebajes.

• El boquerón dela Viuda Negra, en Huacho:

- En esta parte de Huacho, un grupo de pescadores estaba realizando su faena con normalidad hasta que vieron la figura de una sirena. Ellos le contaron a sus compañeros del puerto, pero no les creyeron.

• La Quinta Heeren, en Lima:

- Los interesados en la arquitectura antigua usan este lugar como uno de los puntos de visita en su radar y es que muchos de ellos tienen a ir por lo paranormal, encontrando el lugar perfecto para quizá poder pasar por ello.

¿Por qué se llama Casa Matusita?

Su nombre, Matusita, inició desde que se puso un negocio de ferretería en el primer piso, hecho ocurrido alrededor de los años 50, en el siglo XX, aunque ya en el XXI, un banco ocupó el espacio, pero los trabadores de ese entonces, como antiguos mencionaban que escuchaban ruidos extraños provenientes de la segunda área del inmueble.

Una de las leyendas más escuchadas en nuestro país comenzó hace más 250 años, exactamente por 1754, donde una mujer persa, Parvaneh, dedicada a la sanación de enfermedades, fue considera duna bruja y como nos encontrábamos en medio de la Santa Inquisición, la torturaron en reiteradas oportunidades para condenarla a morir en la hoguera.

‘Los fantasmas se divierten’

‘Los fantasmas se divierten’ era un programa radial que se emitía por Panamericana a partir de las 11 de la noche, era conducido por el periodista Humberto Vílchez Vera, quien era natural de Mendoza, Argentina. El programa se emitía por Radio Central 930 KCS, considerada la más popular en los 60’.

Sus emisiones eran una conversación con el público oyente mediante el teléfono. En esos tiempos, Vílchez Vera era un reconocido presentador y la gente creía mucho de las historias que este contaba y relataba por las noches. En ese sentido, uno de sus anuncios más fuertes y que estremeció al público fue que ingresaría a la Casa Matusita y que estaría en el lugar por 7 días.

¿Qué conductor de televisión ingresó a la casa Matusita y terminó por volverse loco?

Muchos hablan de Humberto Vilchez Vera, conductor de la década de los 70, que dijo en señal abierta que pasaría 7 días y noches en la Casa Matusita. La historia que cuentan los limeños dice que solo estuvo dos horas o cuatro días y él salió llevando a cabo insultos, gritos e incluso botando espuma por la boca. Además, tuvo complicaciones psicológicas y fue recluido en un manicomio durante tres meses.