Este fruto seco cobra fama por ofrecer más proteína que el huevo: es perfecto para ganar masa muscular

Al considerar un estilo de vida saludable y equilibrado, es común enfocarnos en la alimentación y la actividad física. Sin embargo, a menudo subestimamos la relevancia de fortalecer la masa muscular. La masa muscular desempeña un papel crucial en el funcionamiento de nuestro organismo. No solo nos brinda la capacidad de movernos, sino que también contribuye a la quema de calorías, incluso en momentos de reposo.

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¿Cuál es el fruto seco con más proteína que el huevo y que es imprescindible para ganar masa muscular?

Mantener una masa muscular óptima no solo es beneficioso para controlar el peso y mejorar el metabolismo, sino que también ayuda a prevenir enfermedades, influye en la postura y el equilibrio, y acelera la recuperación de lesiones. Los expertos destacan el consumo de huevo como una excelente opción para aumentar la masa muscular debido a su alto contenido proteico.

Sin embargo, las almendras sobresalen como un fruto seco aún más rico en proteínas que el huevo. Según el portal Tua Saúde, con tan solo 50 gramos de almendras se obtienen alrededor de 12 gramos de proteína, el doble de lo que aporta un huevo cocido.

Propiedades de las Almendras:

Las almendras son mucho más que una simple fuente de proteínas, ya que también están repletas de una amplia variedad de nutrientes esenciales que aportan grandes beneficios para la salud.

• Para prevenir y controlar la diabetes. Las almendras son una excelente fuente de fibra que contribuye a regular los niveles de glucosa en el organismo, lo cual es fundamental para prevenir picos de azúcar. Además, gracias a sus compuestos antioxidantes como los flavonoides y taninos, las almendras ayudan a mantener en buen estado las células del páncreas, el órgano encargado de producir insulina. De esta forma, colaboran en regular la respuesta del cuerpo a esta importante hormona.
• Apoyo en la pérdida de peso. Las fibras y proteínas presentes en estos alimentos son aliados importantes para mantener la sensación de saciedad y reducir el apetito a lo largo del día, lo cual resulta beneficioso en las dietas destinadas a la pérdida de peso. Además, la fibra juega un papel clave en la lucha contra el estreñimiento, promoviendo así una mejor salud digestiva.
• Salud ósea. Los minerales presentes en estos alimentos son esenciales para la salud ósea, ayudando a fortalecer los huesos y prevenir enfermedades como la osteoporosis. Destacan el calcio, el magnesio y el fósforo, que son fundamentales para mantener una buena salud ósea.
• Para reducir el colesterol LDL. El consumo de alimentos ricos en omega 3, 6 y 9, que son grasas saludables con propiedades antiinflamatorias, es fundamental para favorecer la disminución del colesterol LDL, conocido como "colesterol malo". Esta práctica resulta esencial en la prevención de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Incorporar estos ácidos grasos esenciales en la dieta diaria puede contribuir significativamente a mantener una buena salud cardiovascular y reducir el riesgo de padecer afecciones relacionadas con el corazón.
• Protección cerebral. Las almendras, ricas en antioxidantes como la vitamina E y los flavonoides, desempeñan un papel fundamental en la protección del cerebro contra el estrés oxidativo y la inflamación, lo que contribuye a mantener una óptima salud mental. Incorporarlas en la dieta puede ser beneficioso para prevenir enfermedades neurológicas como el Alzheimer y la demencia, gracias a sus propiedades protectoras y su capacidad para promover el bienestar cerebral.

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Propiedades de las almendras

• Proteínas. Esenciales para desarrollar y reparar los músculos.
• Grasas saludables. Benefician el corazón y el bienestar general.
• Fibra dietética. Mejora la digestión y la saciedad.
• Vitamina E. Protege las células del daño oxidativo y fortalece el sistema inmunológico.
• Magnesio. Crucial para la función muscular y nerviosa y ayuda a generar energía.
• Vitamina B2. Importante para convertir los alimentos en energía.
• Antioxidantes. Protegen las células del daño causado por los radicales libres.
• Calcio, magnesio y fósforo. Esenciales para huesos y dientes fuertes.