Cinco beneficios de ser ordenados

“Menos es más”. Acumular ropa y objetos no contribuye a la felicidad, al contrario, desordena tanto la casa como la mente.

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Sentirse bien en casa es de suma importancia porque aporta seguridad interior que permite afrontar con más serenidad los acontecimientos externos.
Sentirse bien en casa es de suma importancia porque aporta seguridad interior que permite afrontar con más serenidad los acontecimientos externos.Fuente: Insider

Poner en orden tus armarios y, en general, tu casa, te permite crear un espacio en tu hogar, pero también en tu cabeza. Poner en orden, lejos de ser trivial, es indicativo de un estado mental particular.

Ordenar es casi como una actividad física y puede resultar agotador después de varias horas. Igual que con el deporte, el cuerpo está cansado y la mente vacía, lo que aporta una incomparable sensación de satisfacción y calma.

  • Cajones desbordados, armarios que tienen problemas para cerrar, acumulaciones, se desbordan como nuestras emociones, tendemos a amontonarnos por miedo a perder una parte de nosotros mismos. Pero al clasificar, descartar y reciclar nos ofrecemos la oportunidad de desvincularnos del pasado, de reservar un nuevo espacio para el futuro y para los proyectos, pero sobre todo para vivir el presente sin cargas.
  • “Menos es más”. Acumular ropa y objetos no contribuye a la felicidad, al contrario, desordena tanto la casa como la mente. Vivir mejor con menos y volver a centrarse en lo esencial implica ser más ordenados con todo lo que nos rodea. Las personas con tendencia a acumular tendrán que gradualmente deshacerse de lo superfluo, ya que deshacerse de todo de repente puede resultar confuso.
  • No es raro observar que después de un cambio de vida (cambio de trabajo, separación, duelo) queremos reorganizar nuestros espacios. Permite tomar conciencia de lo que ha pasado, y de lo que queremos experimentar en el futuro. Poner en orden el interior de su hogar también le permite ordenar su vida.
  • Sentirse bien en casa es de suma importancia porque aporta seguridad interior que permite afrontar con más serenidad los acontecimientos externos. Las personas que se sienten bien en casa son más capaces de reorganizar sus vidas. Es más fácil trabajar cuando el escritorio está ordenado: la mente está más despejada y las dificultades parecen menos insuperables.

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