Siria condena la “cobarde agresión” de Estados Unidos y advierte que bombardeo traerá consecuencias

El gobierno de Siria condenó el viernes 26 de febrero “la cobarde agresión” de Estados Unidos por el bombardeo a las instalaciones que pertenecían a milicias respaldadas por Irán, donde al menos 22 milicianos fallecieron. Asimismo, advirtió que “tendrá consecuencias que agravarán la situación” en la región.

De acuerdo, a la agencia de noticias árabe SANA, el Ministerio de Exteriores de Siria condenó “en los términos más enérgicos” el bombardeo que lanzó el gobierno de Joe Biden.

“Tal agresión constituye un indicio negativo de las políticas de la nueva administración estadounidense, que supuestamente se adhieren a la legitimidad internacional, no a la ley de la selva, que la anterior administración estadounidense utilizó para lidiar con las crisis regionales e internacionales”, indicó la Cancillería de Siria en un comunicado.

Asimismo, subrayó que "las fuerzas de ocupación estadunidenses" llevan a cabo "una agresión flagrante a la soberanía, unidad e integridad de los territorios sirios y que “contradice el Derecho Internacional y la Carta de Naciones Unidas”.

Por ello, Siria pidió a Estados Unidos cambiar “su enfoque agresivo” contra la nación y que “deje de brindar apoyo a las organizaciones terroristas que siguen atacando a Siria y su pueblo”.

Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, el ataque aéreo alcanzó objetivos de las Fuerzas de Movilización Popular (FMP), una coalición de milicias progubernamentales iraquíes, y la milicia iraquí Kataib Hezbolá en la provincia de Deir Ezzor.

Horas antes del bombardeo, el Departamento de Defensa de Estados Unidos informó de un ataque contra las infraestructuras usadas por milicias apoyadas por Irán en Siria y que fue ejecutado “siguiendo las instrucciones del presidente”, Joe Biden, como represalia por los ataques recientes sufridos por personal estadounidense y de la coalición en Irak.

El portavoz del Pentágono, John Kirby, reconoció en un comunicado, que sus fuerzas militares, bajo el mando del actual presidente de Estados Unidos, atacaron la zona fronteriza sirio-iraquí.