Kenia: mujer transforma plástico reciclado en adoquines más fuertes que el concreto [VIDEO]
Nzambi Matee diseñó sus propias máquinas para hacer una fábrica que procesa desechos plásticos para crear adoquines hasta siete veces más resistentes que los de concreto.
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Nzambi Matee es una ingeniera de materiales de construcción en Kenia, África, que viene desarrollando una técnica que le permite transformar plásticos, difíciles de procesar, en adoquines con una resistencia notablemente superior a los elaborados en concreto.
La agencia Reuters entrevistó a Nzambi, quien arrojó un adoquín con fuerza contra el sendero de una escuela construido con ladrillos hechos de plástico reciclado que produce su fábrica en Nairobi, la capital de Kenia, para comprobar su resistencia.
“Nuestro producto es casi de cinco a siete veces más resistente que el hormigón”, indicó la fundadora de Gjenge Makers, fábrica que transforma los desechos plásticos en materiales de construcción duraderos.
La ingeniera obtiene los desechos plásticos de las fábricas de envases de manera gratuita, aunque paga por el plástico que obtiene de otros recicladores. Su fábrica produce 1,500 ladrillos al día, hechos de una mezcla de diferentes tipos de plástico.
Se trata de polietileno de alta densidad, utilizado en botellas de leche y champú; polietileno de baja densidad, a menudo utilizado para bolsas de cereales o sándwiches; y polipropileno, que se utiliza para cuerdas, tapas abatibles y cubos. Pero ella no trabaja con tereftalato de polietileno o PET, comúnmente utilizado para botellas de plástico.
Los residuos plásticos se mezclan con arena, se calientan y luego se comprimen en ladrillos, que se venden a diferentes precios, según el grosor y el color. Sus ladrillos grises comunes cuestan 7.70 dólares por metro cuadrado.
Nzambi diseñó sus propias máquinas, y dijo que su fábrica viene reciclando 20 toneladas de plástico de desecho desde su fundación en 2017. La ingeniera planea agregar otra línea de producción más grande que podría triplicar la capacidad y espera alcanzar el punto de equilibrio para fin del 2021.
Nzambi instaló su fábrica después de estar cansada de esperar que el gobierno africano resolviera el problema de la contaminación plástica. En diciembre de 2020, recibió el premio Jóvenes Campeones de la Tierra de la ONU, por desarrollar materiales de construcción alternativos, sostenibles y asequibles, así como por promover la cultura del reciclaje en Kenia y África.
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