Google celebra el legado de James Naismith, el profesor que creó el básquet con dos cestas de melocotones

Google le dedica un doodle este viernes al profesor y entrenador canadiense-estadounidense James Naismith, quien inventó el juego de básquet o baloncesto en 1891.  

Un día como hoy, pero de 1891, James Naismith anunciaba la creación de un nuevo juego llamado “baloncesteo” y sus reglas originales se publicaron en las páginas de The Triangle, un periódico escolar de Springfield College; sin embargo, jamás imaginó que su invención sería un conocido deporte que es practicado en más de 200 países en la actualidad.

Por ello, la compañía de Google no dudó en rendirle homenaje con un doodle a James Naismith por su contribución con uno de los deportes más conocidos en el mundo: el básquet.

Historia de James Naismith

Nació el 6 de noviembre de 1861 en la provincia de Ontario, Canadá. Estudió la carrera de educación física en la Universidad McGill, donde tiempo después logró graduarse con honores.

En 1890 ingresó a trabajar como instructor en el YMCA International Training College en Springfield, Massachusetts. En esa institución, se le asignó desarrollar un juego de interior para los estudiantes durante el invierno de Nueva Inglaterra.

Bastó dos canastas de melocotón y una pelota de fútbol para que James Naismith se inspirara en la creación del famoso deporte conocido actualmente como "básquet".

Inicialmente, el juego contaba con 10 reglas e incluía equipos de nueve jugadores siendo un gran éxito por un conjunto de diversos como fútbol americano, fútbol y hockey sobre césped. En 1936, el básquet tuvo su debut olímpico en Berlín, Alemania, y James Naismith se encargó de lanzar la pelota para dar inicio al primer juego.

“Naismith imaginó el básquet como una forma para que todos los estudiantes se mejoren física y mentalmente. Si bien el juego se introdujo en una época en la que las escuelas estaban segregadas, Naismith vio a todos como personas con potencial para el deporte. Incluso, a lo largo de su vida tomó medidas para que el básquet pudiera llegar a más jóvenes. Desde entonces se ha convertido en un fenómeno global que cruza las barreras raciales y de género”, informa El País.