La tuberculosis es una enfermedad bacteriana infecciosa causada por Mycobacterium tuberculosis, que afecta con mayor frecuencia a los pulmones. Se transmite de persona a persona a través de gotitas de la garganta.
La infección por tuberculosis es extremadamente común: se estima que una cuarta parte de la población mundial está infectada. Todos estamos en riesgo de desarrollar la enfermedad y este riesgo depende de múltiples factores, el más importante es el estado de su sistema inmunológico. Por eso es necesario refozarlo.
Con el mundo todavía centrado en la pandemia de Covid-19, recordemos que la tuberculosis y la malaria siguen siendo dos de las enfermedades infecciosas más mortales. La eliminación de la tuberculosis va por buen camino, pero el progreso va un poco lento para cumplir con la meta de reducir la incidencia en un 80% y la mortalidad en un 90% en 2030.
Si bien existe una vacuna contra la tuberculosis llamada la BCG o bacilo de Calmette-Guérin, esta no es de uso común, por lo tanto, tenemos que prevenirla. Por lo general, la tuberculosis se trata con antibióticos, pero no estamos hablando de solo 10 días. ¡Los antibióticos para la tuberculosis deben tomarse durante seis a nueve meses para que sean efectivos!
Sí, tú puedes prevenir la tuberculosis, pero ¿cómo prevenirla naturalmente?