Jeanine Áñez a la cárcel: condenan a 10 años de prisión a expresidenta interina de Bolivia

La expresidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, fue condenada a 10 años de cárcel tras ser acusada de realizar un golpe de Estado contra Evo Morales en 2019, según dispuso el Tribunal Primero de Sentencia de La Paz.

Áñez cumplirá la condena en una cárcel de mujeres en La Paz tras  tres meses de haberse iniciado el juicio y 15 meses después que fuera encarcelada de manera preventiva.

Durante ese tiempo, los medios locales informaron que la exmandataria transitoria intentó suicidarse por pasar sus días en la cárcel, pues afirmaba que era inocente. “Cada hora de cárcel sin delito es una hora que crece la injusticia”, manifestó en su momento.

Según el Tribunal,  liderado por el juez Germán Ramos, Jeanine Áñez fue condenada “por los delitos de resoluciones contrarias a la Constitución e incumplimiento de deberes [...], condenándola a la pena de 10 años”.

Apelará fallo

En su alegato final, Añez declaró que el Tribunal “excluyó” las pruebas que descartaban un golpe de Estado a Evo Morales en 2019, quien se mantuvo 14 años en el gobierno. “Nunca busqué el poder”, indicó. Incluso, la exmandataria anunció que va a apelar fallo condenatorio. “No nos quedaremos acá, iremos a justicia internacional”, manifestó.

Cabe resaltar que la exgobernante fue juzgada por sus actos en el cargo de senadora, antes de que asumiera la presidencia interina de Bolivia, el pasado 12 de noviembre de 2019.

¿Cómo llegó Jeanine Áñez a la presidencia de Bolivia?

Jeanine Áñez sucedió a Evo Morales después de dos días que éste dimitiera de su cargo presindencia, en medio de una fuerte conflicto social. Los opositores acusaron que Morales hizo fraude en las elecciones de octubre de ese año, para poder ganar un cuarto mandato consecutivo hasta el año 2025.

En el poder, la expresidenta habría sofocado fuertemente a la oposición de movimientos sociales afines a Morales. De acuerdo a un estudio de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en los primeros meses de su gobierno se registró 35 fallecidos en protestas producidas en Bolivia.