Una mujer de nacionalidad peruana que cuidaba a una anciana durante la pandemia de coronavirus es investigada en España. Según informó el diario El Mundo, la longeva de 75 años falleció de COVID-19 y, desde ese momento, la fémina se habría adueñado de la propiedad sin intenciones de dejar la residencia de la difunta octogenaria.
Ante ello, la policía fue hasta la vivienda y tomó las declaraciones de la peruana, de nombre Rosa, quien se desempeñaba como asistenta del hogar y póstumo a la muerte de la anciana a causa del coronavirus habría ordenado por su cuenta incinerar el cadáver sin avisarle a las dos hijas de la longeva mujer.
“Me gustaría saber qué pasó con mi madre esos días. Cuando nos enteramos de su muerte (de mi madre) ya estaba incinerada (...) Creo que mi madre no murió de forma natural y vamos a hacer todo lo posible para que se aclare lo que ha pasado. Tenemos indicios de que le ha podido hacer algo”, declaró Rosana, una de las hijas de la mujer fallecida.
Asimismo, el informe del diario español sostiene que la empresa Desokupa ha tomado el caso para intentar desalojar a la peruana, quien es madre de dos pequeños. Ella sería acusada “de homicidio, hurto, apropiación indebida, usurpación de domicilio y estafa”.
La mujer peruana fue contratada a inicios de febrero y trabajaba por dos horas de lunes a viernes en la residencia ubicada en la ciudad de Madrid, en España. Además, Rosana, quien es hija de la fallecida, reveló que su madre murió un sábado. “Ese día no tenía que ir a la casa, pero apareció y dice que descubrió el cadáver de mi madre al entrar en la casa pero no avisa al 112, ni hace nada”.
“A finales de marzo yo estaba ingresada por coronavirus, pero tenía contacto diario con mi madre durante esos días del pico máximo de la pandemia. De la noche a la mañana nos dijeron que había muerto. Un día antes de fallecer ella estaba bien y no sabemos qué es lo que le pasó porque el certificado médico señala que mi madre murió por posible COVID-19”, añadió.
La pareja de Rosana señaló que ha intentado negociar con la mujer para desaloje la vivienda a cambio de una gran suma de dinero. “Si tuviera dignidad se habría ido ya. La he ofrecido hasta 6.000 euros y le he ofrecido trabajo y un piso de alquiler y me contestó que si le daba 15.000 euros que igual se iba”.
Cabe resaltar que la mujer peruana realizó un insólito comentario sobre el hecho en un video, pues afirmó que las personas que cuidan a los ancianos en Perú se pueden quedar con sus viviendas cuando ellos mueren.