Este jueves 18 de febrero se conmemora el Día mundial del Síndrome de Asperger y los cinéfilos traen a la mente la película Mi nombre es Khan, protagonizada por las estrellas de Bollywood, Shahrukh Khan y Kajol.
El director de Bombay, Karan Johar, presenta una enternecedora historia ambientada en los Estados Unidos tiempo después de los ataques terroristas del 11 de septiembre.
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En esta película se presenta a un joven llamado Rizvan Khan que padece del síndrome de Asperger, que es poco común para muchos pero que cada vez se escucha con más frecuencia.
Según estudios, presenta características esenciales como la incapacidad para la interacción social, presencia de patrones de conducta, actividades e intereses repetitivos.
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Una de las características presentes en el síndrome de Asperger y que se presenta en Mi nombre es Khan es el apego, aparentemente inflexible a rutinas o a rituales específicos, tal como puede verse en varias escenas de la película.
Rizvan Khan es un hombre musulmán cuya vida está marcada por el síndrome de Asperger. Se enamora perdidamente de la bella Mandira (Kajol Devgan), una madre soltera hindú que vive su versión del sueño global del éxito.
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El buen Khan emprende desinteresadamente una impactante odisea en Estados Unidos. Con toda su ingenuidad, transmite paz y compasión, proporcionando una realidad que entra en la vida de cada persona con la que se cruza.
En el nombre de la mujer que ama, el protagonista se presenta a sí mismo diciendo simplemente: “Mi nombre es Khan y no soy un terrorista”.
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