Sexo: descubre el Shibari, la técnica japonesa hermana del Bondage

En Japón el sexo y la sexualidad se vive de una manera diferente a la occidental. Basta con revisar uno de sus productos de exportación más conocidos: el manga y el anime. 

En ellos, se observa la fijación que tienen los japoneses por incluir como parte de sus rituales sexuales el uso de cuerdas y nudos para atar a la pareja. 

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¿En qué consiste el Shibari?

Esta técnica sexual que recuerda a los procedimientos Bondage, utiliza cuerdas de textura suave y estimulante para atar a la pareja. 

La otra persona, aprovecha que su pareja está atada para estimular sus zonas erógenas y genitales, de diversas formas, como la masturbación o recurriendo a la penetración. 

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¿Es efectiva esta técnica?

El grado de efectividad va en relación al grado de confianza de la pareja. Debido a que la otra persona, al estar totalmente inmovilizada e incluso suspendida en el aire, desplaza toda su confianza en la otra persona, quien le debe brindar seguridad, al tiempo que le proporciona placer. 

Ambos se pueden turnar para ser atados y mientras lo estén, estarán a la expectativa de todo lo que realiza su pareja, lo que los sumergirá en un grado de excitación mucho mayor a que el sexo normal.

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Lo que debes saber antes de iniciar

Para iniciarte en esta técnica sexual, opta por conseguir una cuerda de entre 7 a 8 metros de larga. Que sea de fibra natural suave. La puedes conseguir en tiendas de sexo o en páginas especializadas en Internet. 

Existen 9 tipos de ataduras, con un nombre distintivo y un objetivo específico. Por ejemplo, el Takate Kote o Gote, es el nudo base y consiste en atar los brazos tras la espalda. Esta técnica se conoce también como Ushiro que significa detrás. 

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Precauciones que debes considerar

Debido a que se trata de nudos que pueden resultar difíciles de desatar, ten siempre al alcance de las manos tijeras curvas para cortar la soga en caso de emergencia. 

Otra recomendación es que cada cierto tiempo compruebes que las ataduras no estén cortando el flujo sanguíneo, en especial de las extremidades.