Conoce los 6 mejores deportes que debes practicar para prevenir infartos

La actividad física es buena para la salud, en todos los sentidos. Eso no es una novedad. Sin embargo, existen disciplinas más adecuadas según cada condición que queramos mejorar o prevenir, como reducir el riesgo de infartos, insuficiencia aórtica, hipertensión, entre otras enfermedades.

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¿Sabes qué deportes son los adecuados para prevenir infartos? Acá te lo contamos:

1. Tenis

En realidad, podemos agrupar además todos los ejercicios que se desarrollen usando una raqueta: pádel, squash, bádminton y tenis de mesa.

Estas disciplinas están asociadas a un menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, ya que reducen la tensión arterial y mejoran la función del corazón.

Además, porque combina componentes interválicos de gran intensidad con descansos cuando hay saque o se anota un punto.

El gasto energético de este deporte permite a su vez controlar el peso graso y mejorar la función muscular. Es recomendable para los diabéticos y personas con obesidad.

2. Senderismo

Se trata de un ejercicio de intensidad moderada que, además de servir para prevenir infartos, se aconseja en pacientes que ya hayan sufrido uno.

Este deporte mejora la respuesta del corazón al aumentar las cavidades de este órgano y el ingreso de sangre por cada latido.

Además mientras caminamos el transporte de oxígeno y demás sustancias nutritivas se incrementa. Mejora la salud de los vasos sanguíneos, facilita el retorno venoso hacia el corazón o los pulmones y permite respirar profundamente.

Para aprovechar estas bondades la caminata debe realizarse en entornos rurales, sin importar la época del año o las características del terreno.

3. Natación

Sin dudas se trata de uno de los deportes más completos que existen y ayuda sobremanera en la salud cardíaca porque, al nadar, ejercitamos una buena parte de la musculatura y desarrollamos la coordinación neuromuscular.

En cuanto a los beneficios para el corazón, debemos destacar el control de la presión arterial. Y como si no fuese suficiente, la natación aumenta el gasto energético, mejora el nivel de grasas en sangre (reduce el colesterol) y reduce el peso graso.

Entre las ventajas adicionales de este deporte podemos mencionar también que no produce impactos en las articulaciones y que se puede practicar a cualquier edad.

Se recomienda nadar a partir de los 40 años para prevenir infartos.

4. Esquí

Este deporte de montaña quizás puede ser considerado como muy peligroso o para personas jóvenes y atléticas; sin embargo, deslizarse por la nieve usando tablas y palos puede ser lo que necesitamos para tener un corazón sano y fuerte.

El esquí de fondo ofrece varios beneficios para el sistema cardiovascular debido a que requiere una considerable demanda energética del tipo aeróbico.

El tamaño del corazón, la frecuencia cardíaca, la tensión arterial, el flujo y el volumen sanguíneo mejoran notoriamente al esquiar.

5. Aeróbic

Todos los ejercicios considerados aeróbicos son “cardiosaludables” y, además, intervienen en la coordinación neuromuscular.

Es que la danza, el aeróbic o cualquier baile mantienen el peso saludable (se pueden perder hasta 260 calorías en media hora de actividad moderada).

A su vez este tipo de disciplina tiene un aspecto lúdico más que importante ,y por ende, es capaz de reducir los efectos nocivos del estrés.

Eso sí, no es preciso asistir a una clase en una academia. Podemos, simplemente, bailar en casa nuestras canciones favoritas.

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6. Ciclismo

Es un ejercicio indicado para todas las personas que o bien desean prevenir un infarto o ya lo han padecido.

Si se practica con regularidad y la intensidad es la adecuada permite movilizar los músculos de las piernas, los glúteos y las caderas.

Es más, a parte de disminuir el riesgo de padecer un ataque cardíaco, equilibra la presión arterial, reduce el colesterol y la posibilidad de sufrir trombosis.

Asimismo, aumenta la sensibilidad a la insulina, estimula la producción de químicos encargados del estado de ánimo y el estrés y previenela aparición de artrosis o de hernias discales.