Reino Unido: Padres denuncian a los hospitales porque están dejando morir a sus hijos graves de coronavirus
Los familiares de pacientes con enfermedades crónicas están siendo obligados a firmar una responsiva para que no se les realice reanimación pulmonar (RCP) por ser vulnerable al coronavirus.
Únete al canal de Whatsapp de El Popular- Fin del seguro social en Estados Unidos: indocumentados no gozarán de ningún beneficio
- Día Internacional del Hombre se adelantó en algunos países: Descubre por qué se celebrará los 19 de marzo
Los familiares de los menores infectados de la mortal pandemia de coronavirus denunciaron que están siendo obligados por las clínicas del Reino Unido a firmar una responsiva que prohíbe que sus hijos sean resucitados en caso de que perdieran la batalla contra la enfermedad, según indicaron fuentes locales.
Según se informó, los especialistas de la salud intentan ahorrar tiempo para atender a los pacientes que están padeciendo en la Unidad de Cuidados Intensivos a causa de la mortal enfermedad y ven en las maniobras de RCP un obstáculo para continuar con su trabajo.
LEE MÁS: Teoría afirma que laboratorio chino creó la pandemia del coronavirus financiado por Estados Unidos
Asimismo, el Instituto Nacional de Excelencia en Salud y Atención es uno de los centros que solicitaron a sus doctores para que evaluarán las condiciones médicas de sus pacientes con parálisis cerebral, discapacidad, cáncer y autismo para ser catalogados como médicamente frágiles para evitar que se les brinde la atención en estos centros.
“Nadie tiene derecho a decidir si alguien es digno de RCP o no. Ilhan es un luchador, siempre lo ha sido”, indicó una indignada madre que se ha visto perjudicada porque su hijo que padece de cáncer le han quitado el beneficio de reanimación por ser vulnerable al coronavirus.
MIRA TAMBIÉN: China restringe información sobre el origen del coronavirus y se presume que ocultan la verdad al mundo
Cabe resaltar que no solo los niños están siendo desahuciados por los centros de salud también los ancianos que también han tenido que firmar este tipo de responsiva al ser considerados como pacientes de alto riesgo mortal ante el covid-19.
“Me hicieron sentir que no valía nada y que era una carga para la sociedad. Pero todavía no me estoy muriendo”, afirmó Elizabeth, de 61 años, narró cómo se sintió cuando el hospital le retiró todo ayuda para derrotar al coronavirus.