Los tres filtros de Sócrates: aplica esta práctica cuando llegan los rumores
Los tres filtros de Sócrates nos invita a reflexionar antes de juzgar a tu alrededor.
Únete al canal de Whatsapp de El PopularEn estos timpos de inmediatez y donde la gente tiene el poder de opiniar sin mayor control mediante las redes sociales sobre diversos temas volviéndose en muchos casos hasta virales según sea coyuntura y entra a colasión esta conocida anécdota de los tres filtros del filósofo griego Socrátes el cual nos propone reflexionar antes de juzgar al resto.
Estos tres filtros nos puede servir para comprender mejor el contexto y no caer en una circulo viciosos de opinar sin escuchar a la otra parte.
¿En qué consiste los tres filtros de Sócrates?
Cuenta según la historia que esos tres filtros nace cuando en una oportunidad llegó uno de sus discípulos en gran estado de agitación. Le dijo al filósofo que se había encontrado con uno de sus amigos y que este le había hablado de Sócrates con gran malevolencia.
Al escuchar esto, Sócrates con la sabidura que cargaba le pidió primero calma y esperara un momento y le dijo que antes de escuchar su argumento se debe pasar por tres importantes filtros creados por este filósofo.
Sócrates le formuló una pregunta a su dicipulo “¿Estás absolutamente seguro de que lo que vas a decirme es verdad?” y en ese caso su dicipulo no sabia con seguridad si era verdad lo que había escuchado. “Entonces no sabes si todo es cierto o no”, dijo el filósofo. El discípulo tuvo que admitir que no.
Luego como Segundo filtro el maestro griesgo le pregunta a su discípulo una segunda pregunta: “¿Lo que vas a decirme es bueno o no?” y le respondió lo que tenia no era bueno, eran palabras que, a su juicio, le causarían malestar y el maestro entonces de nuevo interviene “Vas a decirme algo malo, pero no estás totalmente seguro de que sea cierto” y su discípulo admitió que así era la situación.
Y ya como tercer filtro Socrates le plante lo siguiente a su alumno “¿Me va a servir de algo lo que tienes que decirme de mi amigo? Y mas bien el discípulo tuvo más dudas queno sabia si la información el cual le iba a brindar le realmente le iba servir. Cuenta esta adencota que al fin Socrates se negó a escuchar a escuchar lo que su discípulo quería decirle. “Si lo que deseas decirme no es cierto, ni bueno e incluso no es útil ¿Para qué querría saberlo?.
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