Cómo explicar el Día de los Muertos a los niños

El Día de los Muertos, celebrado en el país el 1 y 2 de noviembre de cada año, suele ser para los adultos un motivo para visitar al familiar o amigo queridos que ya no se encuentra con nosotros. Sin embargo, para un niño la experiencia de ir a un camposanto resulta novedosa y llena de curiosidades.

Muchas veces los menores se llenan de dudas al ver que el padre o la madre llora frente a la tumba de un ser amado. Sin una correcta explicación de lo que ocurre, en el niño se puede generar temores o tristeza hacia lo desconocido.

¿Qué entendemos sobre la muerte? Al respecto, existen diversas creencias religiosas y cualquiera es libre de escoger la que mejor se adapte a sus ideales. No obstante, a un menor se le debe explicar de tal forma que alimente su imaginación sobre la muerte de manera sana.

Primero, habría que aclararles que el Día de los Muertos es un día de alegría y de gozo porque se recuerda al ser querido. Se recuerda sus hazañas, sus virtudes, sus anécdotas contadas por él o por ella misma cuando estuvo en vida. Es decir, es traer al presente las acciones de lo que un día ellos fueron en vida.

Las historias que se cuenten pueden ser acompañadas por fotografías o a través del solo relato. Las flores y la música que se les lleva es parte de esa celebración. Decirles que el Día de los Muertos más que un culto a la muerte es un culto a la vida.

Finalmente, la fiesta del Día de los Muertos puede ser acompañada de una pequeña reunión familiar, respetando los protocolos de bioseguridad, pues aún el COVID-19 continúa afectando al país. Los niños pueden participar con los adornos en casa o divirtiéndose con la recolección de caramelos o dulces, recitando poemas, etc., en el ámbito de familiar.