Rick Campodónico de Aurich: “Desperdicié la oportunidad de jugar en Parma y Lazio”

Alguna vez, Ronaldinho dijo en uno de sus días de gloria o quizá de llanto, que “aprendí todo sobre la vida con una pelota a mis pies”, dejando claro que en el fútbol se sufre y se goza, aunque para él, casi siempre fue lo primero. A Rick Campodónico Pérez, el fútbol, en efecto, le ha mostrado las dos caras de la medalla.

Tiene el gusto de hacer lo que más le gusta, juega al fútbol profesional, es volante, pero el fútbol le ha dado también algunos golpes duros, incluso en el presente, con el Juan Aurich de su tierra, Chiclayo, en la Liga 2, pero no se desanima, sigue adelante, sabe que hay una luz al final del túnel.

• ¿Qué nos puedes decir de ti como escolar y tus inicios en el fútbol?
• Terminé en el Appul College de Chiclayo, donde también estudiaba Yordy Reyna, pero él es mayor. Es un colegio que es full estudio y casi nada de deportes. Pero yo estuve en una filial de Universidad San Martín y después me trajeron a Lima para pasar una prueba y me quedé hasta el 2015.

• Estando en el cuadro santo te llegó la posibilidad de probarte en Parma, de Italia. ¿Qué ocurrió?
• Sí, hubo una posibilidad, pero a don Alberto Masías (presidente de las divisiones menores) se le pasó el tiempo, no pasó los documentos y no pude viajar.

• Te habrás sentido morir.
• ¿Quién no? Pero el 2014 tuve mi revancha, cuando pasé una prueba en una sede de Lazio, que venía a ser lo que es en Perú el Esther Grande de Bentín, que forma jugadores y después los venden.

• ¿Cómo fue tu estadía en Italia?
• Había una persona de la filial del Lazio que se había comprometido a solventar mi estadía y alimentación, entre otras cosas más. Tuve miedo, por mi cabeza pasaron una serie de cosas, así que decidí regresar. Tenía 17 años.

• ¿Solo fue por eso?
• También había unos problemas documentarios, pese a que tengo la ciudadanía italiana por mi abuelo, pero no salían los documentos. Me enviaban una carta de estudio con la posibilidad de trabajar, pero la Embajada de Italia no quiso y todo se perdió. Desperdicié mi oportunidad de jugar en esos equipos.

• ¿Sabes hablar italiano?
• Si so parlare...

• ¿Qué ocurrió tras tu regreso?
• Me desligo de San Martín y el 2015 me voy al Juan Aurich, que era dirigido por Roberto Mosquera, pero no pude jugar porque era mitad de temporada y debí esperar hasta el año siguiente, que llegó Víctor Rivera, que ya me conocía de San Martín. Firmé un contrato de 3 años.

• ¿En tu mente debe estar el partido del debut?
• Claro, con Inti Gas (ahora Ayacucho FC) fue una jornada redonda, ganamos, hice un gol y me hicieron un penal. Fueron años maravillosos en el Ciclón, hasta que el 2018 descendimos. Paso luego al UTC con Franco Navarro y el año pasado volví al Aurich.

El ciclón no sopla

• ¿Qué tan cierto fue la posibilidad de que juegues en la “U”?
• Fueron tres años consecutivos que se habló de esa posibilidad, pero no se concretó, aunque el año pasado estuve muy cerca. Pero trajeron a Enzo Gutiérrez, que al final no jugó mucho y se lesionó.

• Este año Juan Aurich estaba llamado a ser protagonista de la Liga 2, pero surgieron cosas que lo tienen en una crisis deportiva.
• Al inicio uno siempre tiene la mejor disposición, con un plantel con jugadores que desarrollaron una intensa pretemporada, pero luego viene lo feo, que a media hora de que empiece el primer partido, con Pirata (cayeron 0-2), no había los carnets. Fue un golpe que nos afectó mentalmente y nos bajoneó.

• Tuvieron que presentar un equipo de emergencia, porque solo tenían 12 jugadores hábiles, ¿no?
• Sí. Jugaron chicos que no aparecían como titulares y muchos en otros puestos. Un delantero tuvo que jugar de marcador.

• El técnico Teddy Cardama dijo que incluso jugaron algunos lesionados. ¿Tanto así?
• Sí. Para completar el equipo se utilizó a un chico que durante la pretemporada estuvo desgarrado.

Ese de negro...

• Pero también ocurrieron cosas extras por parte de los arbitrajes, denunció tu club.
• El árbitro quería echar a todos e incluso al utilero. Casi al final, estábamos ganando 1-0, y nos botó a dos jugadores y en los descuentos Llacuabamba nos volteó el partido. Ese juez nos hizo perder el partido. Sentimos una gran impotencia y frustración y hasta terminamos llorando.

• ¿Le dijeron algo al árbitro?
• Sí. No pude contenerme y le dije que estaba aprovechando porque no había cámaras, porque sino no estaría arbitrando tan descaradamente a favor del rival.

• Pero vino la recuperación ante Los Chankas y hasta metiste un gol de chalaca.
• Se me dio un gol de chalaca por primera vez en mi carrera. Era un gol que lo practicaba desde chico.

• Pero parece que solo fue un espejismo, porque en la última fecha cayeron 0-4 ante Santos.
• Para el que no vio el partido, puede parecer que Santos nos pasó por encima, pero la verdad es que nosotros mismos nos hicimos los goles.

• También está que no les pagaron sus sueldos, ¿no?
• Reconocemos que algunos jugadores pasaron dificultades porque tienen familia o mantienen a sus padres, pero el profesor Cardama manejó bien el tema. Esperamos que todo se normalice, ya nos pagaron el primer mes y están a tiempo de cumplir el segundo.