Tecnología y salud: previniendo el síndrome visual por computadora

Cerca de 70 millones de personas en el mundo padecen el Síndrome Visual por Computadora, una afección que surge del uso prolongado de dispositivos digitales. Este síndrome se manifiesta a través de síntomas como cansancio, resequedad ocular, ardor, fatiga visual y dolores de cabeza. Sin embargo, los avances tecnológicos han permitido el desarrollo de herramientas que priorizan la salud visual de los usuarios.

Becket Barrionuevo, Gerente de ACER Perú, destaca que la combinación de dispositivos innovadores y hábitos preventivos puede ayudar a mitigar los efectos negativos del uso excesivo de pantallas. A continuación, se presentan algunas funciones de las laptops que contribuyen a cuidar la salud visual.

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Funciones tecnológicas para la salud visual

Las laptops modernas incorporan diversas características diseñadas para proteger la vista de los usuarios. Entre ellas se encuentran:

• Vision Care: Esta función ajusta automáticamente el brillo y la temperatura del color de la pantalla según la hora del día. Además, envía recordatorios sutiles para tomar descansos periódicos, lo que ayuda a aliviar la fatiga visual.
• Blue Light Shield Pro EyeSafe 2.0: Reduce en un 30% la luz azul de alta energía en comparación con las pantallas LCD estándar, minimizando así el riesgo de daño ocular.
• LightSense: Esta tecnología ajusta automáticamente el brillo de la pantalla en función de la luz ambiental, garantizando una experiencia visual cómoda.
• ProxiSense: Envía recordatorios periódicos para que los usuarios tomen descansos, promoviendo así una mejor salud ocular.
• Flickerless: Elimina el parpadeo de la pantalla, lo que asegura una experiencia de visualización más agradable y menos fatigante.

¿Cómo prevenir esta enfermedad?

Además de las innovaciones tecnológicas, la Academia Americana de Oftalmología sugiere adoptar hábitos preventivos para evitar problemas oculares. Uno de los más conocidos es la regla 20-20-20: cada 20 minutos, aparta la vista de la pantalla y enfoca un objeto que esté a unos 20 pies (6 metros) de distancia durante 20 segundos. Este simple ejercicio permite que los ojos se relajen y reduzcan la tensión acumulada.

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Asimismo, se recomienda el uso de lágrimas artificiales para combatir la resequedad ocular y asegurarse de que la pantalla esté a la altura de los ojos, manteniendo una distancia de entre 50 y 70 centímetros. Estas prácticas, combinadas con las funciones tecnológicas, pueden contribuir significativamente a la salud visual de los usuarios en un mundo cada vez más digital.