En el sexo es importante que ambas personas disfruten y sientan placer, por lo que encontrar una posición adecuada que eleve aún más la temperatura en la cama es muy importante y para ello podemos inspirarnos en el Kamasutra, el libro que muestra algunas de poses más aventureras y osadas en el acto sexual que siempre pueden ser divertidas de utilizar.
Una de las mas populares es la pose del cangrejo y por si no la conocías en esta nota de El Popular contamos cómo es que se realiza y todo los detalles que debes tomar en cuenta para que signas experimentando con su pareja y puedan encontrar que es lo que más les gusta a los dos.
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Si bien esta pose sexual es considerada una de las más raras del Kamasutra también es una en la que se puede controlar profundidad y velocidad y aquellas personas que lo han experimentado les parece un posición agradable que le suma picardía al acto sexual.
Para hacer "El Cangrejo" , el hombre se debe sentar y estirar las piernas, mientras las manos van hacia atrás sosteniendo su cadera. La mujer debe sentarse sobre la pelvis de su pareja dando la espalda y apoya sus manos sobre las piernas para comenzar a moverse al ritmo que ella marque.
Se puede iniciar con movimientos leves o rápidos de arriba hacia abajo, en círculos o de adelante hacia atrás. El hombre puede ayudar empujando su cadera hacia arriba o con sus manos tomar el control sosteniendo los muslos o cintura de su pareja.
Para seguir ayudando a todas las parejas interesadas en ponerle un toque diferente a su encuentro sexual con la electrizante pose del enchufe, la cual tiene un mayor control en el hombre en donde no solo implican la capacidad de decidir sobre la actividad en sí, sino también la posibilidad de guiar el ritmo y la intensidad, por lo que e recomienda iniciar con la postura del misionero.
Para esta pose el hombre debe incorporarse a la mujer un poco sin dejar la penetración, donde una de las piernas de la mujer debe pasar debajo de su pareja hasta que le quede justo entre las suyas. Una vez hecho esto, ya se puede notar que la mujer se está colocando de manera distinta, quien ahora tendrá que levantar su otra pierna para que el que penetra pueda agarrarla firmemente. De esta manera, obtendrá un nuevo punto de apoyo para el coito.
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