La halitosis o mal aliento es un problema común de salud que se puede desarrollar por una infección dental, mala higiene o consumo de ciertos alimentos.
Por ello, si sufres de esta condición, incluso pese a haberte lavado los dientes, es importante que conozcas cuáles son las causas y, por supuesto, acudir al dentista.
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- Caries entre los dientes.
- Periodontitis.
- Sarro y bacterias en la lengua: la mayoría de casos de mal aliento tienen origen en la lengua.
Si bien la falta de higiene bucal y la periodontitis son las causas más comunes del mal aliento, para algunos especialistas la halitosis también puede ser síntoma de problemas estomacales, hepáticos, respiratorios o incluso sinusitis. Por eso, si tienes un olor desagradable en la boca debes acudir al odontólogo.
Hoy en día, la tecnología ha avanzado y se puede medir el mal aliento a través del halímetro para diagnosticar si el paciente sufre de halitosis y a su vez proveerle el tratamiento más efectivo.
Según los dentistas, en dos o tres sesiones, ya se puede remediar el mal aliento. El tratamiento consiste en reforzar la limpieza bucal, usar el hilo dental y enjuagues médicos que son más efectivos que los comerciales.
Eso sí, aparte de un buen cepillado de dientes se debe tener una limpieza profunda de la lengua, con un dispositivo que arrastra el sarro de esta zona de la boca.
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- Consumir abundante líquido a lo largo del día y evitar la sequedad en la boca.
- Mantener una alimentación sana, minimizando el consumo de condimentos fuertes.
- Comer una manzana verde, algunos odontólogos aseguran que esta fruta puede reemplazar a la técnica del cepillado.
- Buscar tratamiento para los problemas médicos subyacentes. De ser necesario, se requieren pruebas médicas previas.
- Si tu mal aliento o halitosis persiste, es conveniente acudir al médico.
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