
Una fotógrafa tuvo cáncer de mama y le hicieron una doble mastectomía, cirugía que trata sobre la total extirpación de los pechos. Una vez recuperada, decidió no hacerse la operación de reconstrucción y, en cambio publicar en las redes una sesión de fotos mostrando su torso desnudo y al natural.LEA ESTO: Salud: los mitos más frecuentes del cáncer de mama“Una vez que pasó el tratamiento y que realicé mi proceso interior me sentí con mucha más confianza en mi misma que nunca antes. Me veía más atractiva y femenina” explicó.Mientras tanto, a su alrededor, muchas personas le preguntaban e insistían por qué no decidía hacerse la reconstrucción mamaria y hasta qué tamaño eligiría esta vez. “No es algo para mí. Sería una recuerdo constante de lo que perdí. Uno no puede pretender que esas lolas son propias”, dijo.Desde ya, llegar a esa decisión no fue tan fácil. “El primer año después la cirugía fue duro de transitar. Sin pelo y sin tetas, me sentía un hombre. Pero ahora estoy muy conforme con mi imagen”, agregó.La anécdota más dura, cuenta, fue una vez que entró a un baño de mujeres y le preguntaron qué hacía ahí. Su respuesta fue sin vueltas: “tuve cáncer”.
¿Por qué hizo pública la sesión de fotos? “Quiero mostrarle a otras mujeres que pasaron por lo mismo, cómo podrían verse sin hacerse la reconstrucción mamaria.
El diagnóstico de Jai llegó en abril de 2014. Después de descubrir un hundimiento en uno de sus pechos (ese es uno de los síntomas del cáncer de mama menos difundido). “Le dije al médico que me quite las células malas y que me extirpe los dos senos”, dijo.
Ahora, “no escondo mis pechos y estoy orgullosa de mis cicatrices”, concluye Jai.
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