Cierra para SIEMPRE un ICÓNICO café de EE. UU. tras más de 40 años de historia

Durante más de cuatro décadas, el café Las Palmas fue mucho más que un lugar para comer en el centro de Miami. Para cientos de vecinos, trabajadores y visitantes, representó un espacio cotidiano cargado de identidad, memoria y afecto. Hoy, ese punto de referencia cultural llega a su fin con el anuncio oficial de su cierre definitivo.

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El local, conocido por su ambiente familiar y su cocina de raíz cubana, se despide dejando una profunda marca en quienes lo consideraron parte inseparable de la vida urbana de la ciudad. Tras 45 años de actividad ininterrumpida, sus puertas se cerraron para siempre.

Un ícono de la cocina cubana que marcó época

Las Palmas abrió en 1980 en el 209 SE First Street con una capacidad modesta de 33 asientos, pero con una propuesta que pronto conquistó al público. Platos sencillos y tradicionales —como tostadas con mantequilla, sándwiches cubanos, bistec con papas y piñas coladas— definieron un menú que se mantuvo fiel a sus raíces.

En 2016, el negocio pasó a manos de la familia Magalhães, que preservó la esencia del café y fortaleció su rol social. Además de la atención diaria, el local se convirtió en un espacio solidario, con iniciativas de apoyo a personas sin hogar y campañas benéficas dirigidas a niños con enfermedades.

El anuncio del cierre se realizó a través de redes sociales, donde los propietarios compartieron un mensaje de despedida cargado de emoción: "Después de 45 años sirviendo a la comunidad del centro de Miami, ha llegado el día en que debemos cerrar nuestras puertas por última vez. El sábado 15 de noviembre será el último día para Las Palmas".

Las razones detrás del cierre y el legado que deja

De acuerdo con información publicada por Miami Herald, que entrevistó a Carla Ferrari Magalhães y a su hijo Mario Ferrari Magalhães, la decisión fue el resultado de varios factores acumulados. Entre ellos, el aumento constante del alquiler en el centro de Miami, el encarecimiento de los insumos y la reducción de clientes tras la pandemia, agravada por la expansión del trabajo remoto.

Paradójicamente, el café vivió un repunte en ventas poco antes de cerrar. "En las últimas tres semanas he tenido ventas récord", relató Carla. Sin embargo, explicó que la recuperación llegó demasiado tarde para sostener el negocio.

A sus 65 años, Carla aseguró no sentirse triste y adelantó que se tomará un tiempo para reflexionar sobre su futuro. "Tengo buenos recuerdos de este lugar, e hice muchos amigos", comentó. "Echaré de menos el centro. He estado aquí por más de 35 años, y me encanta el centro".

Para la comunidad, la despedida fue especialmente emotiva. "Aquí era un home away from home, donde la gente venía a tomar cafecito o almorzar una comida casera buena, bonita y barata", expresó Mario Magalhães. Muchos clientes acudieron en los últimos días para decir adiós.

Una de ellas fue Andrea Hernández, clienta habitual: "Siempre venimos aquí todos los días. Tomamos café en la mañana, en la tarde, a veces tres o cuatro veces al día", contó. "Las Palmas para nosotros es como una familia. Carla es como una tía, y de verdad nos entristece mucho que cierren, porque era un pedacito de casa que ya no tenemos".

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Además de su oferta gastronómica, Las Palmas fue escenario de encuentros comunitarios, noches de comedia, karaoke y eventos que reforzaron su carácter de punto de unión. "Las noches de comedia que hacíamos con mis amigos eran únicas. Llegamos a tener más de 80 comediantes de Miami aquí, y después seguía el karaoke hasta las cuatro de la mañana", recordó Mario.

Con su cierre, Las Palmas deja un vacío difícil de llenar en el centro de Miami y se consolida como un símbolo de una época que quedará en la memoria colectiva.