Incrementan las estafas durante las inscripciones de Medicare: Así puedes evitar ser víctima

Cada año se abren los periodos de inscripción de Medicare y también surgen los estafadores que intentan aprovecharse de los miles de personas mayores beneficiarios. Estos malhechores buscan robar no solo dinero, sino también la información persona. Si bien, puede ser un trámite estresante, solo tienes que estar bien informado ante las señales de alerta.

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Ten en cuenta que desde el 15 de octubre al 7 de diciembre, millones de beneficiarios tienen que revisar o cambiar sus planes de cobertura, y es justo en ese periodo cuando los fraudes aumentan.

¿Cómo evitar las estafas del Medicare?

Inicialmente debes saber que los impostores suelen hacerse pasar por representantes oficiales de Medicare, y utiliza llamadas telefónicas, mensajes de texto o correos electrónicos falsos para pedir datos personales o pagos.

Además, lo que debes considerar es que las tarjetas de Medicare son totalmente gratis y se envían mediante correo. Si alguien te dice que necesita tu número de cuenta bancaria o tu tarjeta de crédito para enviarte una nueva tarjeta, esta es una nueva señal de estafa.

Tampoco confíes en lo que aparece en el identificador de llamadas. Los estafadores suelen falsificar el número que parezca que proviene de Medicare u otra agencia del gobierno. En el caso de que tengas dudas, puedes colgar y comunicarte directamente con las fuentes oficiales del gobierno previo a compartir con alguna información.

Por otro lado, cada estado cuenta con su propio Programa Estatal de Asesoría sobre Seguros de Salud (SHIP), donde puedes recibir orientación gratuita y personalizada acerca de tu cobertura de Medicare, sin ningún tipo de interés comercial.

¿Qué hacer si sospechas de un estafador?

En el caso de que sospeches que has sido contactado por un impostor o que alguien ha intentado estafarte, puedes denunciarlo inmediatamente llamando al 1-800-MEDICARE (1-800-633-4227).

Debes mantenerte alerta y verificar la información antes de actuar, ello puede marcar la diferencia entre proteger tu salud y tu bolsillo o convertirte en víctima de un fraude.