ADIÓS a la deuda de tu tarjeta de crédito: Desde este tiempo ya no tendrás que pagarla y quedará prescrita

Los principales problemas financieros que tienen las personas, en la mayoría de los casos, se debe a las tarjetas de crédito, ya sea porque no saben organizarse económicamente o no poseen los ingresos suficientes para cubrir sus gastos. La deuda comienza cuando no alcanzan a pagar todo el monto y solo cancelan el mínimo al banco.

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El problema surge cuando se acumulan mes a mes el interés compuesto, lo que puede hacer que la deuda se vuelva más complicada de pagar si solo se cubren los gastos mínimos; no obstante, pocos saben que esto puede prescribir.

¿Cuándo prescribe una deuda de tarjeta de crédito en EE.UU?

La prescripción de una deuda comienza a contarse desde el último pago realizado o la última actividad en la cuenta. Esto quiere decir que si un consumidor deja de pagarlo y ya no hay movimientos posteriores, lo legal comienza a correr.

Pese a que la deuda no desaparece de inmediato de los registros financieros, si queda protegida de las acciones legales como juicios o embargos. Esto significa que el banco pierde todo el derecho a forzar el cobro mediante la vía judicial.

Con esta norma se busca dar un equilibrio entre la protección del consumidor y la responsabilidad de las entidades financieras. De esa manera se evita que las personas queden atrapadas de por vida con estas deudas bancarias.

Ten en cuenta que cada estado fija su propio periodo de prescripción, por lo que hay lugares donde el plazo es de tres años, mientras que en otros puede llegar hasta seis años. Asimismo, las deudas hipotecarias o médicas poseen plazos distintos. Por ello, los consumidores deben conocer la legislación de su estado para saber en qué momento tu deuda deja de ser reclamable en los tribunales.

¿Qué hacer si tu deuda ya prescribió?

Si una deuda de tarjeta de crédito ya prescribió, la recomendación es no reactivarla realizando un pago parcial o reconociendo el saldo pendiente, debido a que esto reinicia el plazo legal. En el caso de recibir reclamos, lo más aconsejable es solicitar por escrito la confirmación del estado de la deuda y, si es necesario, consultar con un asesor legal para asegurarte que la prescripción esté vigente.