Migrante PERUANO será deportado y su ESPOSA promete no abandonarlo: "Iré a Perú, porque es mi esposo"

El pasado 23 de mayo, Cristian Ibáñez, un migrante peruano de 32 años, fue detenido en Anchorage, Alaska, por agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), sin previo aviso ni la presencia de un intérprete en español. Su esposa, Paola Jiménez, recibió una llamada en la que Cristian le informó sobre su arresto, dando inicio a una serie de gestiones para conocer los motivos de su detención y brindarle el apoyo necesario.

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Antecedentes migratorios y proceso de deportación en EE. UU

Ibáñez ingresó a Estados Unidos en 2022 por la frontera de Arizona. En 2023, se emitió una orden de deportación en su contra por no presentarse a una audiencia migratoria en Nueva York, situación que, según Jiménez, desconocían. Durante su estancia en el país, Cristian cumplió con los requisitos impuestos por las autoridades migratorias, incluyendo el uso de una aplicación para confirmar su ubicación y asistencia a citas presenciales.

Tras su arresto, Cristian fue trasladado al Complejo Correccional de Anchorage y posteriormente al centro de detención de ICE en Tacoma, Washington. Durante su detención, enfrentó dificultades para comunicarse debido a la falta de servicios de interpretación y no recibió su medicación para la acidez estomacal, ya que no sabía cómo solicitarla en inglés.

El emotivo compromiso de su esposa Paola Jiménez

Ante la inminente deportación de su esposo, Paola Jiménez ha decidido dejar su vida en Alaska y seguirlo a Perú. "Iré a Perú, porque es mi esposo", afirmó, destacando su compromiso y amor incondicional. Paola también ha expresado su intención de denunciar las irregularidades en el proceso de detención y deportación de Cristian.

Contexto de las políticas migratorias en EE. UU.

La administración del presidente Donald Trump ha intensificado las políticas migratorias, lo que ha resultado en un aumento de las detenciones y deportaciones de migrantes indocumentados, incluyendo a ciudadanos peruanos. Se estima que aproximadamente 300,000 peruanos residen en EE. UU. en situación irregular, lo que los hace susceptibles a estas medidas.

Ante esta situación, el gobierno peruano, a través de la Cancillería, ha manifestado su disposición para recibir a los ciudadanos deportados y brindarles apoyo en su reintegración. Se han coordinado esfuerzos con diversas entidades para asegurar la atención integral de los deportados, incluyendo asistencia médica y apoyo social.