
La política migratoria en Estados Unidos continúa evolucionando bajo la administración de Donald Trump, poniendo en riesgo de deportación a ciudadanos de 16 países debido a ajustes en el Estatus de Protección Temporal (TPS).
El TPS es un programa que ha permitido a migrantes de ciertos países permanecer en EE. UU. ante condiciones adversas en sus naciones de origen, como conflictos armados o desastres naturales.
Las autoridades responsables, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos (USCIS), revisan la situación de estos países de manera periódica para determinar si continúan o no con el beneficio del TPS.
Aunque el TPS ofrece la oportunidad de vivir y trabajar legalmente en EE. UU., es un beneficio temporal que requiere renovaciones constantes. La eliminación del TPS para los siguientes países podría resultar en deportaciones inmediatas:
Si el DHS concluye que las condiciones en alguno de estos países han mejorado significativamente, podría finalizar el TPS, dejando a sus beneficiarios en peligro de ser deportados.
Para obtener el TPS, los interesados deben seguir un proceso administrativo con USCIS, que incluye la presentación de formularios oficiales, pruebas de identidad y residencia en Estados Unidos, y el pago de tarifas.
Aspectos cruciales para la solicitud del TPS incluyen:
Las continuas revisiones del TPS añaden una capa de incertidumbre para los beneficiarios, quienes deben mantenerse al tanto de cambios legislativos y explorar sus opciones legales con asesores migratorios especializados.
Periodista especializado en actualidad, tendencias y entretenimiento. Licenciado en Periodismo en la Universidad Jaime Bausate y Meza. Interesado en temas relacionados con farándula, celebridades, tendencias, coyuntura, etc.