¿Cuál es el límite? Un caso que en las últimas horas ha dejado sorprendido a más de uno. La protagonista de esta historia se llama Ava Misseldine, una mujer de 49 años de Ohio, en Estados Unidos que no tuvo problemas en arrebatarle la identidad a una bebe muerta de hace 44 años para conseguir préstamos federales, el cual le sirvió para sostener empresas inexistentes.
Su accionar no pasó por alto a la justicia americana, ya que acaba de ser sentenciada este martes a seis años de cárcel. Conoce más a continuación.
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Según la información que se cuenta, Ava Misseldine, fue la encargada de la identidad de una bebé llamada Brie Bourgeois, quien murió en 1979 y actualmente su féretro está en un cementerio de Ohio.
Fue en el 2003 que tramitó una identificación, una tarjeta de Seguridad Social y hasta una licencia de conducir, con el nombre suplantado. Al no ser detectado oportunamente, tuvo un trabajo de azafata en compañía de aviación y también tuvo la posibilidad de formarse académicamente en la Universidad Estatal de Ohio.
Cuando la aparición del COVID-19, la sentenciada siguió aprovechándose tanto del nombre falso de la criatura como el suyo para así el gobierno le otorgará ayuda financiera, la que ascendió a 1,5 millones de dólares.
Pero como se dice no hay mal que dure mil años y al final fue descubierta. El Departamento de Justicia de Estados Unidos determinó que presentó documentos falsos en las solicitudes para el financiamiento. Cuando tuvo el financiamiento pudo inyectar capital a varias panaderías y empresas de catering. Durante todo ese tiempo pudo comprar una vivienda en Utah por 647 mil dólares y otra en Michigan por 327 mil dólares.
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