Sigue en tragedia. Brasil registró este miércoles 90.303 contagios de coronavirus, un nuevo récord diario y que lo ratifica como el segundo país en ser el epicentro global de la pandemia.
Brasil es el país más afectado por la COVID-19 luego de Estados Unidos. Las muertes no dan tregua, las últimas 24 horas se elevó la cifra de fallecidos por el virus, 2.648 decesos, la segunda más alta después de la registrada el día martes con lo que suma 285.000 víctimas, según el boletín difundido por el Ministerio de Salud este miércoles.
De acuerdo con el ministerio, la tasa de letalidad por coronavirus se mantuvo en 2.4% de la población, la de mortalidad subió a 135,5 muertes por cada 100.00 habitantes y la de incidencia se ubicó en 5,564,6 contagiados en la misma proporción de la población.
Brasil, con 210 millones de habitantes sufre la etapa más letal y virulenta de la pandemia, esto en parte provocada por las nuevas variantes del virus, entre ellas la brasileña que tuvo origen en la Amazonía.
Además, el sistema de salud esta al borde del colapso pues tras el aumento de contagios aumentaron las hospitalizaciones y la tasa del uso de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) supera el 80% por lo que los gobiernos regionales y municipales volvieron a imponer medidas de restricción como toques de queda.
El epidemiólogo Pedro Hallal, que trabaja en el estado sureño de Rio Grande do Sul, habla de una situación de desbordamiento que implica un peligro que se proyecta más allá de las fronteras del país.
“21% de todas las muertes ocurridas en el mundo ayer (9 de marzo) debido al COVID-19 ocurrieron en Brasil, un país que solamente tiene el 2,7% de la población mundial. Entonces, esto es enorme. Brasil se está convirtiendo en una amenaza para la salud pública global”, dijo Hallal a la BBC.
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