Olga y Vincenzo Molino se conocieron a los 18 años en Lucera, Foggia, en Italia y vivían en un apartamento en Milán. Sin embargo, el coronavirus los separó a solo una hora de diferencia el domingo 15 de noviembre. La pareja era inseparable durante más de medio siglo, desde 1957.
“No salían, tenían mucho cuidado, solo el abuelo iba a la tienda y a la farmacia, lamentablemente se enfermaron. Habían celebrado 63 años de matrimonio el 26 de setiembre y siempre estaban juntos”, indicó Katia, una de las seis nietas, según la prensa italiana.
Sin embargo, la segunda ola de la pandemia COVID-19 en Italia irrumpió esta hermosa historia de amor. Tras diez días enfermos en su casa ambos fueron hospitalizados por problemas de saturación de oxígeno.
“Fue el abuelo el que mostró los primeros síntomas”, indicó la nieta, “y luego también la abuela”, agregó. La pareja fue ingresada en el hospital San Gerardo de Monza el pasado 11 de noviembre. Pero no estaban en la misma habitación.
Olga estaba en condición menos grave que Vincenzo. La anciana había pedido tener la chaqueta de su esposo en la habitación, para sentirlo cerca. Cuatro días después, el domingo, falleció Olga. Una hora después, a las 3.00 p.m, le siguió Vincenzo.
La nieta agradeció a los médicos y enfermeras que los atendieron y quienes, también, les permitieron despedirse. Asimismo, indicó que después del funeral, se incinerarán los cuerpos de Olga y Vincenzo, que de esta manera permanecerán “siempre juntos”.