Después de negarlo durante meses, China admitió que destruyó muestras del coronavirus al inicio del brote de la mortal pandemia en el país asiático confirmando de esa manera, lo dicho por Estados Unidos sobre una presunta complicidad en ocultar información sobre el COVID-19.
Según se informó, Liu Dengfeng, supervisor de la división de ciencia y educación de la Comisión Nacional de Salud de China, confirmó que el 3 de enero en Pekín se ordenó eliminar todas las pruebas de coronavirus “en ciertas instalaciones no calificadas para manejar tales enfermedades altamente infecciosas como una medida para prevenir el riesgo para la seguridad biológica del laboratorio y prevenir desastres secundarios causados por patógenos no identificados”, sin especificar la cantidad de laboratorios.
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Sin embargo, el funcionario aclaró que no escondieron información del Sars- Cov-2 en China, sino que “fueron eliminadas para evitar riesgos para la seguridad biológica del laboratorio y prevenir desastres secundarios, causados por agentes patógenos no identificados”.
Cabe resaltar que China fue el primer país en reportar el primer caso de coronavirus, pero no ha sido afectado por la enfermedad a comparación de otros países como Estados Unidos, que cuenta con casi 90 mil muertes a causa de COVID-19.
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El origen del coronavirus en un laboratorio chino al parecer no sería una teoría conspirativa, debido a que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, indicó que tendría evidencias que demostraría que la mortal pandemia se creó en el Instituto de Virología de Wuhan.
“Sí, lo he visto. Lo he visto”, afirmó el mandatario, pero señaló que no estaba autorizado a dar más detalles sobre lo que había leído y tampoco quién le habría brindado dicha información, e inmediatamente aseguró que la Organización Mundial de la Salud (OMS) “debería estar avergonzada”.
El servicio alemán, conocido como Bundesnachrichtendienst (BND), indicó que “el 21 de enero, el líder chino Xi Jinping pidió al jefe de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, que retuviera la información sobre la transmisión entre humanos y que retrasara la advertencia de una pandemia”.