La creciente propagación del coronavirus en Reino Unido ha puesto en jaque a miles de médicos y enfermeras que vienen batallando contra la mortal enfermedad, entre ellos una joven enfermera de 28 años de edad que venía ayudando en la lucha contra el virus COVID-19.
La joven identificada como Mary Agyeiwaa Agyapong trabajaba en el Hospital Universitario de Luton y Dunstable, en Londres, donde fue diagnosticada con la mortal enfermedad que terminó por arrebatarle la vida, pero no la de su pequeña que se encontraba aún en su vientre.
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Tras permanecer en estado crítico debido al letal virus de Wuhan, la joven fue internada en el nosocomio, lugar donde sucumbió a la enfermedad, no obstante, los médicos lograron extraer de su vientre a su pequeña hija.
La neonata nació en buen estado de salud en el hospital en el que trabajaba su joven madre.
“Con suma tristeza puedo confirmarles la muerte de una de nuestras enfermeras, Mary Agyeiwaa Agyapong, quien falleció el domingo”, lamentó David Carter, director ejecutivo de la Fundación NHS de Bedfordshire Hospitals.
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Sus compañeros de trabajo se mostraron visiblemente afectados por la pérdida de Mary Agyeiwaa. “Nuestro pensamiento y nuestras más sinceras condolencias son para su familia y amigos de Mary, en este momento tan triste”, expresó Carter. Hasta la fecha se desconoce si la recién nacida también ha sido infectada con el virus.