La viceprimera ministra encargada de Salud de Rusia, Tatiana Golikova, anunció que su país ha prohibido la entrada de ciudadanos chinos a su territorio, la drástica medida es una forma de hacer frente a la rápida propagación del coronavirus que ya ha dejado más de 1.868 muertos.
“La entrada de ciudadanos chinos a través de las fronteras rusas queda suspendida a partir del 20 de febrero para los viajes de negocios, viajes privados, estudios y turismo”, detalló Golikova.
Asimismo, afirmó que la decisión que entrará en vigencia el próximo 20 de febrero, ha sido tomada “a causa del agravamiento de la epidemia en China y al hecho de que los ciudadanos chinos continúan llegando a territorio ruso”.
La restricción representa un duro golpe al comercio y turismo entre ambos países y otros que usan masivamente los aeropuertos de Rusia como punto de tránsito entre China y Europa.
El COVID-19, nombre por el que en la actualidad se llama al coronavirus, avanza de forma rápida. Según información oficial difundida por la Comisión Nacional de Sanidad de China, hasta el momento la cifra de contagiados se ha elevado a 72.436.
El territorio ruso ya había tomado medidas para evitar que el virus se expanda en su zona. Moscú ordenó cerrar las fronteras de 4.250 kilómetros con su vecino país, asimismo, se suspendieron todos los enlaces ferroviarios y se restringieron los vuelos.