¿Por eso el silencio? La vez que Barata confesó que Repsol aportó en la campaña de Keiko en 2011

Ha pasado más de una semana desde que se llevó a cabo uno de los peores desastres ambientales en la historia de nuestro país, tras el derrame de petróleo en las costas de Ventanilla. Ante ello, diversas autoridades, políticos y líderes de opinión se pronunciaron al respecto y denunciaron a la empresa Repsol como una de las responsables de este daño al ecosistema, pidiendo sanciones severas. Sin embargo, la que sí se mantiene en absoluto silencio es quien venía pronunciándose en cada traspié del Gobierno: Keiko Fujimori.

¿A qué se debe dicho silencio? Si bien se desconocen las verdaderas razones por la que la líder de Fuerza Popular se ha mantenido callada ante el catástrofe ecológico, existen serias sospechas de que ello sería a causa de la relación que tuvo la petroquímica española en el financiamiento de su campaña presidencial del año 2011.

Es que, según reveló en 2018 el exdirectivo de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, Repsol fue una de las compañías que asistieron a una reunión en la sede de la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep), al ser reconocida como una empresa "con capacidad de aporte" para la campaña en la segunda vuelta de las elecciones de hace 11 años, donde se enfrentó en las urnas con Ollanta Humala.

En dicho encuentro, la compañía fue partícipe del acuerdo en donde se accedió a otorgar dos millones de dólares no declarados en favor del fujimorismo. Según confesó Barata durante el interrogatorio realizado por el fiscal del caso Lava Jato, José Domingo Pérez, además de Repsol, también estuvieron involucradas los directivos del grupo Gloria, el grupo Romero, el grupo Brescia y Telefónica.

“La introducción, tengo la impresión, fue del propio presidente de la Confiep de esa época, que era el señor Ricardo Briceño. (…) Se dijo que la campaña de Keiko estaba sin recursos, que Humala estaba creciendo bastante, y que se necesitaba ayudar a Keiko para no tener un gobierno desastroso, que sea de izquierda, y que no era el deseo de los empresarios”, confesó el brasileño.

Seguidamente, el exdirectivo de la constructora precisó que en el momento de la reunió no existió ninguna respuesta concreta, pero que luego fueron llamados por separado, entre ellos a los representantes de Repsol, para concretar la operación en favor de Keiko. En aquel año, Barata indicó que se hizo entrega en dos partes de un millón de dólares no contabilizados en efectivo. Asimismo, mencionó no recordar si otros 200 mil dólares fueron destinados a pagar una publicidad fujimorista.

“Los 500 mil iniciales y los 500 mil finales no fueron contabilizados. Fueron aportes en efectivo. Los 200 mil, tengo dudas. No sé si fue pagada alguna una publicidad o si fue entregado (el dinero) a la misma Confiep, y esta hizo los pagos”, declaró.