Los hermanos Marco Antonio y Kiko Danny Rodríguez Espejo, alcaldes de la Municipalidad Provincial de Julcán (MPJ) y la Municipalidad Distrital de Calamarca (MDV), respectivamente, fueron víctimas de una banda de extorsionadores que hicieron detonar artefactos explosivos en sus viviendas en La Libertad.
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Los facinerosos también dejaron un manuscrito en el domicilio de ambas autoridades ediles. En el que exigen el pago de un cupo de US$ 100 mil para no atentar contra sus vidas ni las de sus familiares.
“Queremos 100.000 dólares. Yo sé que tú me puedes pagar a mí y a mi gente. No metas la pata llamando a los ternas –por la policía–”, dice parte del mensaje en el manuscrito.
La vivienda de ambos alcaldes ubicada en la Mza. Q, Lte. 3, en la zona semirústica de la urbanización El Bosque, en Trujillo, terminó afectada parcialmente, tras la detonación que se produjo en la madrugada.
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Según los agraviados, los criminales también realizaron varios disparos al aire “para llamar la atención”, de los burgomaestres quienes se encontraban descansando dentro del inmueble.
La policía precisó que la granada, que fue desactivada por personal de la PNP y el manuscrito fueron dejados por los delincuentes en la cochera de la vivienda, a dos metros de donde explosionó el otro artefacto.
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