Feminicidio: deudos piden justicia por Kelly

Kelly Elízabeth Olivares Gálvez tenía 28 años y, según sus familiares, vivía un infierno por un sujeto que la acosaba y amenazaba de muerte. 

Ella intentó huir. De hecho viajó a su natal Sullana dos meses para buscar tranquilidad. Creyó que todo estaba tranquilo y regresó a su hogar en el Callao. Sin embargo, fue hallada sin vida, con huellas de golpes, a pocos metros de la orilla de la playa Márquez. Su deudos denuncian que se trata de un nuevo caso de feminicidio.

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La historia de Kelly se conoce recién porque los deudos reconocieron el cadáver, que estaba en la morgue como NN. Los parientes fueron citados a la morgue tras revelarse el nombre de la occisa gracias al análisis de las huellas dactilares.

Con dolor contaron que no sabían nada de ella desde la tarde del martes. “Hace unos meses fue secuestrada al paso y recibió amenazas por parte de una persona que la acosaba, no saben su nombre. La dejaron desmayada cerca de una plaza, pero la policía no hizo caso”, sollozaron.

Se supo que la muchacha trabajaba como mesera en el restaurante de su prima en la zona de Mi Perú, Ventanilla.

La última que la vio con vida fue su hermana que vive en Santa Anita. Se despidieron a las 3 de la tarde del martes.

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“Dos horas después la llamaron y contestó que todo estaba bien. Desde entonces su teléfono sonaba apagado”, comentó su prima Yanitsa Zapata.