Terror en el transporte: extorsiones ponen en jaque a conductores en SJL pese al estado de emergencia

La extorsión golpea nuevamente al sector transporte en el distrito de San Juan de Lurigancho (SJL). En medio del Estado de Emergencia, decretado hace una semana, una nueva amenaza se suma a la creciente ola de violencia que ha generado miedo entre los conductores de buses.

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Nueva empresa de transporte público es extorsionado en medio del Estado de Emergencia

. Esta vez, la empresa Lima Sur S.A. recibió una nota extorsiva en uno de sus paraderos, en Campoy. La mafia exige un pago inicial de 50,000 soles, seguido de cuotas mensuales de 20,000 soles, amenazando con atentar contra la vida de uno de sus choferes si no cumplen.

“No estamos trabajando, solo algunos que deciden salir (…) vivimos del día a día y eso nos afecta para la canasta básica diaria", comenta con resignación el trabajador. "Da miedo salir (…) el peligro es inminente tanto para el usuario como para nosotros mismos", mencionó.

Los trabajadores explican que esta no es la primera vez que reciben amenazas, pero las extorsiones se han intensificado en los últimos días. "Es un problema que se está acrecentando (...) ya anteriormente habían sido amenazas, pero quedó en nada", detalla otro conductor.

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Extorsiones se extienden a otras empresas

La situación no es exclusiva de Lima Sur SA. Trabajadores de la empresa Colonial 94 también han denunciado que viven bajo constante amenaza. Un conductor de esta empresa, que prefiere mantenerse en el anonimato, confiesa que las extorsiones han sido constantes en el último mes. "Nos piden entre 10 y 20 soles por carro, y las amenazas llegan mediante cartas que meten por debajo de la puerta mientras descansamos", relata.

El trabajador añade que la inseguridad en la zona ha aumentado, en parte, por la poca presencia policial. "En esta zona no hay muchos policías (…) la ciudadanía piensa que por ser carro grande se gana bien, pero la realidad es que estamos con ese temor de que nos pase cualquier cosa", sostiene.

La gravedad del problema ha llevado a que conductores de diversas empresas participen en el paro como medida de protesta. "Todos aquí participaron en el paro (...) si el gobierno no aplica esta ley de Terrorismo Urbano, todos vamos a parar", advierte el conductor de Colonial 94, quien teme que el gobierno no tome las medidas necesarias para frenar esta ola de violencia.

Ante esta crisis, los conductores exigen acciones concretas por parte del gobierno. "Nosotros también queremos saber qué acuerdos están llegando, es algo incierto", expresa con frustración un conductor de Lima Sur SA. Mientras tanto, el transporte en San Juan de Lurigancho continúa siendo una actividad de alto riesgo, donde cada salida al trabajo podría ser la última.