La historia de la caída de Vladimiro Montesinos, el hombre que controlaba todo

Vladimiro Montesinos, el brazo derecho de Alberto Fujimori y mejor conocido como "el poder detras del poder", huyó del Perú tras los escandalos de los vladivideos que eran una colección de cintas caseras elaboradas por Montesinos, en las que se le ve sobornando a políticos y empresarios. que generaron el declive del gobierno fujimorista.

Tras concoerse de su huida, surgió un video presentado en el Congreso , en el que se ve a Montesinos huyendo en un yate que lo llevó primero a las islas Galápagos, en Ecuador, y después a Costa Rica. Poco tiempo despues se presumía que se encontraba escondido en Venezuela, lugar a donde llegó para refugiarse en un  barrio pobre en el oeste de Caracas, llamado el sector de Niño Jesús.

Una mañana de un domingo 24 de junio de 2001, periodistas y un gran contingente policíal llegaron hasta este sector y capturaron al prófugo Vladimiro Montesinos en una casa que se veía moderna entre todas las pobres que se encontraban a su alrededor, algo que no pasó desapercibido por las autoridades.

Fue así que un día despues de su captura fue regresado a Lima desde Caracas, rápidamente fue transportado inmediatamente a "la carceleta" de la capital peruana, un sótano en el Palacio de Justicia donde se suele internar a las personas próximas a ser juzgadas.

Desde ese momento, Montesinos enfrentó más de 60 cargos, como por ejemplo por crímenes contra los derechos humanos, emitida en 2010 y que culminará en junio de 2026. Actualmente Se encuentra internado en el Centro de Reclusión de la Base Naval del Callao, una cárcel de máxima seguridad que él mismo mandó a construir en los años 90 para el hoy terrorista muerto Abimael Guzmán.

Cambio de rostro

Según la información presentada por Luis Ponte, director de una clínica privada en la capital venezolana, un tal Manuel Antonio Rodríguez Pérez, el mismo alias que Montesinos habría utilizado para ingresar al país, se operó en su centro médico y se fue sin pagar.

Ponte le dijo a la agencia Reuters que pensó que Rodríguez Pérez era un venezolano común que sencillamente se quería operar. "El paciente se sometió a una cirugía de reconstrucción en la nariz y los párpados y se fue con la factura aún pendiente", agregó, esta información fue rápidamente por los medios de comunicación Venezolanas y Peruanas.