Korina Rivadeneira: “Ser mamá me haría muy feliz”

Mario Palacios

La bella modelo Korina Rivadeneira regresó a Lima hace unos días y nos confesó su deseo de ser mamá en corto plazo. Sueña tener cuatro hijos y como todo niño debe venir con un pan bajo el brazo, comenzó a costruir junto a Krayg Peña una casa en Venezuela. 

—Sé dijo que estabas embarazada por la foto en la que Krayg te besa el vientre. 

—Nunca dije que estaba embarazada, fue una broma entre Krayg y mi familia. Subimos la foto, no pensé que causara tanto revuelo.  

—¿Han pensado encargar familia? 

—Sí, me encantaría, ser mamá me pondría muy feliz. Yo quiero tener ocho hijos pero como es difícil tendré cuatro (risas). 

—Entonces ya se viene la boda. 

—No, aún no. Yo creo en el matrimonio, que quiera (casarse) es otra cosa. En este momento no quiero casarme, quiero tener hijos, por eso hago trabajo duro. Encargaré hijos en uno o dos años a lo mucho. 

—Ya construyes tu casa en Venezuela. 

—Invertimos nuestro dinero,  compramos un terreno en Isla Margarita (Venezuela), estamos construyendo nuestra casa. Con mi pareja quiero hacer las cosas bien, por eso debo tener un techo propio donde ir cuando me regrese a vivir a mi país. 

—Pese a todo lo que pasa en  Venezuela, apuestas por tu país.  

—Mi país está muy mal, la gente hace lo que le da la gana, es un desastre. El sueldo está por los pisos, hay delincuencia. Lo único que se mantiene bien son las playas. Tengo fe que Venezuela mejore, no ahora, quizás en 5 o 6 años, tengo allá a mi mamá y parte de mi familia.

VUELVE A REALITY

—¿Volverás a Esto es guerra? 

—No lo sé, tengo propuesta de Esto es guerra, Combate y Campeones, estoy analizando las propuestas, depende de muchas cosas para decidirme, ver qué me proponen. 

—¿Hay propuestas para seguir actuando? 

—Sí, para hacer cine. Estoy llevando clases de locución, me estoy preparando. 

—Se criticó mucho a los chicos reality porque son llamados para actuar... 

—Yo actúo antes de hacer reality, no veo nada de malo que actúen. Se les presenta la oportunidad y si les gusta se meten a talleres para hacer las cosas bien. No son improvisados, se esmeran.