¿Cómo proteger a los niños de la viruela del mono?

En los últimos días se ha dado a conocer que la cifra de casos de viruela del mono en el Perú han superado las 2 000 personas contagiadas. Entre ellos, se encuentran 2 niños, quiénes están dentro del grupo vulnerable. Por ello, hoy te contamos cómo puedes proteger a tus hijos de esta enfermedad.

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¿Qué es la viruela del mono?

Es una enfermedad que se transmite por el virus de la viruela del mono. Está dentro del grupo de las infecciones zoonóticas por lo que también se puede contagiar de animales a humanos. También se propaga entre las personas por medio del contacto físico a través de erupciones, fluidos corporales y costras. Este virus también se transmite mediante la saliva y las relaciones sexuales.

En algunos casos ha sido transmitida de una mujer embarazada al bebé a través de la placenta. También mediante el contacto piel a piel de un padre infectado con el niño durante o después del parte. En menor medida se contagia por el contacto con objetos o ropa que hayan sido utilizados por pacientes infectados.

Síntomas de la viruela del mono

La viruela del mono provoca síntomas como fiebre, dolor de cabeza intenso, dolores musculares, dolor de espalda, fatiga, ganglios inflamados y erupciones o lesiones en la piel. Las erupciones suelen aparecer al tercer día de la fiebre. Los principales lugares en las que se sitúan son el rostro, las palmas de las manos y las plantas de los pies. También pueden salir en la boca, genitales y ojos.

Protege a tu hijo de la viruela del mono

Los niños son más propensos a contraer esta enfermedad. Además, suelen mostrar síntomas más graves que los adolescentes y adultos. Sigue estas recomendaciones para que tu pequeño no se contagie:

• Si alguien en casa está infectado o es trabajador de salud; se debe mantener aislado del niño.
• A pesar de que el uso de mascarillas en las escuelas es opcional de acuerdo al Minsa. Igual se recomienda usarla para disminuir el contacto con saliva o lesiones en la boca de personas infectadas.
• Desinfecte el uniforme de su pequeño tras regresar a la escuela y lave la ropa de cama una vez por semana.
• Implementen el lavado frecuente de manos con agua y jabón.
• Evite compartir platos, utensilios u otros objetos personales.
• Si su pequeño lleva juguetes a la escuela o invitan a algún familiar a jugar, desinféctelos al final del día.