Hombre de 27 años sufre 'gripe' cada vez que tiene relaciones sexuales: Es alérgico a su semen [FOTO]

Un hombre de 27 años es tildado como "el hombre más desafortunado del mundo" tras padecer de una rara enfermedad que le hace tener síntomas parecidos a los de una gripe cada vez que tiene relaciones sexuales. El particular caso sucedió en Estados Unidos y ha llamado la atención de la comunidad científica.

El raro caso del sujeto, cuya identidad no se divulgó, ha sido publicado en la revista Urology Case Reports, donde un grupo de especialistas han afirmado que padece del “síndrome de enfermedad posorgásmica” (POIS) y que no es el único en el mundo.

Los expertos explicaron que esta rara enfermedad en el muchacho es una respuesta alérgica o autoinmune a su propio esperma provocándole síntomas similares a los de una gripe como fiebre, tos, estornudos, debilidad muscular entre otros.

No tuvo relaciones sexuales durante 10 años

Es por eso, que el hombre confesó que ha evitado tener relaciones sexuales durante los últimos 10 años. Esto porque a penas llegaba al orgasmo, empezaba a toser y a estornudar. Los científicos que reportaron el caso afirmaron que hay al menos 60 casos de personas afectadas por esta rara patología.

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“Muchos prestadores de salud no la conocen, y mucho menos el público”, dijo el doctor Andrew Shanholtzer, de la Facultad de Medicina William Beaumont de la Universidad de Oakland, coautor del informe del caso. “Es más que probable que esté subdiagnosticado y que haya muchos enfermos por ahí”, añadió.

Finalmente, los especialistas pudieron tratar su condición con varios antihistamínicos haciendo que sus síntomas disminuyan un 90%. Hoy en día el muchacho experimenta una vida sexual normal. Sin embargo, siempre está alerta ante cualquier sintomatología.

¿Qué causa el síndrome de enfermedad posorgásmica o POIS?

“Hay unas células especiales llamadas células de Sertoli que nutren y rodean al esperma y lo mantienen aislado de las células inmunitarias. Si estas células se dañan, el esperma se expone al sistema inmunitario y este, al no reconocerlo, lo ataca como si fuera un virus o una bacteria invasora”, detalló Shanholtzer.