Rostov vuelve a la Liga Rusa y pierde 10-1 por culpa del coronavirus
El equipo de Valery Karpin tuvo que enfrentar el partido ante el Sochi con juveniles luego que seis jugadores dieran positivo al Covid-19.
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Maldito virus. Rostov se llevó la más grande goleada de su historia, y del fútbol ruso, al caer 10-1 ante el Sochi en el reinicio de la Liga Premier. El equipo amarillo tuvo que afrontar este duelo con un plantel juvenil luego que seis jugadores del primer equipo dieran positivo por coronavirus.
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Un día antes del choque ante el Sochi, el Rostov realizó las pruebas de descarte a sus jugadores, de los cuales seis de ellos dieron positivo y según el protocolo sanitario ruso todo el plantel, incluido el comando técnico, se quedaron en cuarentena.
Ante este problema, la directiva del Rostov le pidió a la de Sochi aplazar el partido pero ésta se negó por lo que al cuadro del sur de Rusia tuvo que apelar a su equipo juvenil, donde ningún jugador había debutado en el fútbol profesional y el mayor del plantel tenía apenas 17 años y dos meses.
Sin entrenador ni jefe de equipo, la delegación del Rostov fue presidida por Artashes Harutyunyants, el presidente del club, y Alexei Ryskin, director deportivo, mientras que el equipo fue dirigido por el el entrenador juvenil, Zaurbek Tedeev.
Irónicamente, fue el Rostov quien se adelantó con un tanto del joven Romanov, pero a partir de ahí todo fue cuesta arriba.
Los 10 goles del Sochi pudieron ser más pero el portero Denis Popov hizo 15 milagrosas paradas, entre ellas atajó un penal. Gracias a ello, fue elegido el jugador del partido.