
Quitar la espuma que se forma sobre el caldo de pollo mientras se cocina no causa ningún problema porque no tiene nada tóxico como se cree comúnmente. Son solo proteínas y grasa que expulsa el pollo.
A la hora de prepararla con fuego alto, el pollo libera coágulos de proteínas acompañados de grasa y en cuanto el agua del caldo va hirviendo, las proteínas del pollo se parten y se disuelven logrando colocarse en la parte del centro de la olla.
La espuma en la sopa es un exceso de grasa que puedes dejarla en la olla como también descartarla del platillo para que los alimentos sean más digeribles.
Si deseas quitarla lo puedes hacer con una cuchara mientras cocinas el caldo. Si no vas a consumir la sopa en ese momento, puedes meterla a la refrigeradora y cuando se haya congelado la espuma y grasa se habrán solidificado encima lo cual te hará más fácil retirarla para luego consumirla caliente.
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